Fallece en Berlín Jesús López Cobos

El director de orquesta Jesús López Cobos, natural de Toro (Zamora), falleció este viernes en Berlín tras sufrir una larga enfermedad. Sus restos serán enterrados en su ciudad natal, según informaron en un comunicado desde su agencia, Conciertos Vitoria. Nacido en 1940, tras acabar sus estudios de Filosofía en Madrid, decidió dedicar su vida a la dirección de orquesta trasladándose en un principio al Conservatorio de Viena diplomándose allí en el área de Composición. Recibió el Premio de las Artes Castilla León 2012 y fue nombrado director emérito de la Orquesta Sinfónica de Castilla y León.

Galardonado en los Concursos de Besançon y Copenhague (Nikolai Malko), debutó en Praga como director sinfónico y, en Venecia, como director de ópera. En 1971 fue invitado por la Ópera de Berlín, que en 1981 le nombró director general de música. En este teatro permaneció hasta 1990, llevando sus producciones a Washington y a Japón, donde se ofreció por primera vez la tetralogía completa de Richard Wagner. En 1975 debutó en Los Ángeles y Londres con sus respectivas orquestas filarmónicas, precisan en la web de su agencia.

Durante seis años fue principal director invitado de la Filarmónica de Londres con la que realizó giras por Japón y España.

López Cobos fue el primer director español que subió al podio de la Scala de Milán, del Covent Garden de Londres, de la Ópera de París y del Metropolitan de Nueva York. Dirigió ópera con regularidad, habiendo colaborado, con cinco producciones en la Ópera de La Bastilla de París, en el Metropolitan de Nueva York con ‘Manon’ y ‘Thaïs’; en Chicago, Festival de Orange, etc. Fue además director musical del Teatro Real de Madrid desde septiembre 2003, y director titular de la Orquesta Sinfónica de Madrid.

Su etapa como director titular del Teatro Real concluyó con la temporada 2009-2010. A partir de esa fecha, López Cobos desarrolló numerosos proyectos, tanto en el ámbito operístico como sinfónico.

Fue el primer director que recibió el Premio Príncipe de Asturias de las Artes y era miembro de Honor del Teatro de la Ópera de Berlín. El Gobierno alemán le concedió su más alta condecoración civil, la Cruz al Mérito de Primera Clase de la República Federal Alemana.