Guías para descubrir joyas

El turismo cultural es una de las opciones para las vacaciones. Los que no las tienen son los encargados de descubrir el patrimonio local, como Puri Brezmes

C.C.L.
04/08/2019
 Actualizado a 13/09/2019
Monasterio de Santa María la Real de Gradefes. | L.N.C.
Monasterio de Santa María la Real de Gradefes. | L.N.C.
Disfrutar de las vacaciones no es siempre sinónimo de darse un chapuzón en la piscina o viajar a un sitio con playa. En algunas ocasiones, los días de descanso se aprovechan para descubrir el patrimonio que se esconde a lo largo y ancho de toda la provincia. Y para que eso ocurra, son muchos los guías turísticos que durante el verano enseñan sin descanso algunas de las joyas de León.

Una de ellas es Puri Brezmes, que desde finales de mayo y hasta septiembre se encarga de descubrir a los visitantes el monasterio de Santa María la Real de Gradefes y San Miguel de Escalada. Después de ser guía y trabajar en varias oficinas de turismo, tanto de la provincia como de otros puntos de la geografía nacional, llegó a Gradefes por primera vez este año para descubrir un monumento que "me sorprendió" y que ahora explica a los visitantes, tanto de la provincia como de otros puntos, muchos de ellos haciendo el Camino Vanidiense a Santiago.

A veces sabemos que un monumento está ahí pero no le damos importancia y nos vamos a otros museos o iglesias fuera de León sin ver todo lo que tenemos aquí Desde el mes de julio, las visitas se han incrementado. Ella está de miércoles a domingo en el Monasterio de Gradefes, donde tiene su ‘sede’ junto a las monjas de clausura que todavía residen en él, y cuando salen grupos viaja hasta San Miguel de Escalada para descubrir a los turistas esta joya. Junto a los visitantes, Puri mantiene contacto durante sus horas de trabajo con ellas, con las que tiene "una relación muy buena". "Están en clausura pero ya no es la clausura de antes, son muy abiertas y muy amables y a mí me han acogido muy bien», celebra, «yo estoy en el monasterio todo el día y me dejan las llaves para enseñar el claustro, hablo con ellas, lo que necesite puedo acceder a ellas y enseguida me atienden…".

Por eso y por estar rodeada de un patrimonio que considera "maravilloso", reconoce que el trabajo "me gusta", aunque durante esta época del año "se hace duro", sobre todo en estos dos meses de verano. "Es un poco duro porque no tienes ningún fin de semana libre ni ningún día de vacaciones, aunque es lógico porque es cuando viene la gente", explica. "El problema del turismo es que es muy estacional", reconoce. Por eso, durante el resto del año suele trabajar en otros empleos ya que "apenas hay ofertas para esto". Es durante los meses de verano cuando surgen más puestos de trabajo relacionados con el turismo.

Eso sí, Puri Brezmes asegura que está contenta y su trabajo de este verano está siendo "gratificante" porque los visitantes "suelen salir encantados". "A veces sabemos que un monumento está ahí pero no le damos la suficiente importancia y nos vamos a otros museos o iglesias fuera de León sin ver todo lo que tenemos aquí", lamenta, y "no saben lo que se pierden", confiesa, porque los dos monumentos que ella se encarga de descubrir este año "merecen la pena".
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