Joaquín Besoy: "El 80% del cuadro lo hago del natural"

El artista cántabro presenta sus paisajes en la galería Alemi, casi siempre relacionados con su tierra, y en especial con los Picos de Europa

Vicente García
04/01/2022
 Actualizado a 04/01/2022
El pintor Joaquín Besoy ante un paisaje invernal de los Picos de Europa. | VICENTE GARCÍA
El pintor Joaquín Besoy ante un paisaje invernal de los Picos de Europa. | VICENTE GARCÍA
Joaquín Besoy trae a la galería Alemi cuadros diferentes de muchos lugares de los Picos de Europa, sobre todo de Cantabria, cumbres, invernales, arroyos, ríos, cascadas, pueblos y lugares de lo más variado, donde el verde de los árboles y los prados, el rojo de las flores y los tejados, el blanco de la nieve y los azules del cielo se van alternando formando maravillosos paisajes de los macizos de los Picos.

El autor va generalmente a realizar los cuadros al entorno natural y copia la realidad tal como la ve, aunque luego, en la tranquilidad de su estudio, continúe su trabajo. Es un proceso en fases como él mismo dice: «El 80% del cuadro lo hago del natural, aunque algunos, como el del incendio no pueden ser más que de foto. Voy dos días, hago una buena mancha, sitúo las luces y continúo en el estudio y al final voy otros dos días a finalizarlos». Es una forma de trabajar que le lleva a lugares muy diferentes, aunque cerca de su casa tiene gran cantidad de imágenes que llevar a sus cuadros. Pinta con óleo sobre lienzo, aunque solamente en época de restricciones ha necesitado buscar otro soporte más asequible como explica: «Siempre he trabajado sobre lienzo, pero en la época del confinamiento me quedé sin lienzos y como todo estaba cerrado no podía comprarlos. Entonces iba a una carpintería cercana, me compraba mis tablex, metía una imprimación y ya podía seguir trabajando». Es un modo de pintar que también puede dar muy buenos resultados y la muestra son los trabajos que expone tanto en lienzo como en tablex.

Joaquín Besoy es un consumado y experto paisajista que, muy despacio, va evolucionando. Su estilo autodidacta se ha caracterizado por un realismo que muestra cada uno de los detalles de aquellos paisajes que pinta y tras muchos años representando las imágenes que tan bien conoce reflexiona sobre ello de este modo: «Mi estilo siempre ha sido figurativo realista, pero poco a poco sin querer voy adquiriendo un poco más de impresionismo, en algún cuadro hay muchos brochazos sin detallar las cosas, me gusta como van quedando las obras y lo dejo así». Eso se ve en alguno de los cuadros que no tienen ese detalle que imprimía a los primeros  y que han caracterizado durante años su pintura, tal vez es un modo de evolucionar avanzando hacia una visión más libre.En cuanto a las obras que presenta, hay un cuadro de las montañas leonesas, concretamente de Riaño, donde el Gilbo y las Pintas emergen sobre las vegas de Riaño antes de ser engullidas por el agua. De Cantabria expone diferentes lugares y sobre todo las cumbres del macizo Oriental de los Picos, con el Valdecoro, San Carlos y Cortés como cumbres de referencia, además de las cumbres, las vegas, los valles y los pueblos, donde siempre humean las chimeneas lo que indica que en ellos hay vida, que no están vacíos y sigue habiendo personas que los habitan y ganados que caminan por sus calles. Tiene imágenes donde el color de las flores primaverales destaca sobre las nieves que se están fundiendo al final del invierno en un pueblo de la montaña de Cantabria, que es similar a los Picos de Europa leoneses. Y el nacimiento de ese río en cascada que se despeña desde las más altas cumbre a los valles.

Además del territorio de los Picos tiene otros cuadros más alejados, aunque también paisajes de montaña, Ordesa en Pirineos.  

La obra de este pintor de los Picos de Europa puede contemplarse en la galería Alemi hasta el día 7 de enero y conviene no perdérsela porque es una manera diferente de acercarse a la montaña y disfrutar de su contemplación.
Lo más leído