Las judías verdes con menestrilla de Marcelo Ramón

Otra de retirar restos de la nevera. Le digo menestrilla, por los escasos cinco elementos que utilizamos en la elaboración. Los básicos, aceite, sal, pimienta, perejil, etc..., no cuentan.
Sartén al fuego con dos o tres cucharadas de aceite. Empezamos como siempre, en mi caso, con los ajines picados que van a aromatizar la grasa. Irrumpimos con la cebolla en fina brounoise que cortará la fritura de los ajos, impidiendo que se quemen y por tanto que amarguen. Unos taquines de jamón, representan la categoría del plato. Una punta de harina y una vez rehogada, mojamos con un poco de caldo de ave o verduras. A partir de ahora iremos sumando, habas verdes cocidas al dente, unos cachelos de patata hervida, unos cuartos de ‘champi’s portobello pasados por sartén, unos cherrys salteados y unas mitades de alcachofa también cocidas. Dejamos amalgamar todo removiendo con suavidad, haciendo que cumpla su misión la favorita... hasta conseguir un armonioso conjunto de verduras que parezcan envueltas por un sedoso terciopelo que confiere el carácter a esta receta. No podíamos culminar sin una lluvia de perejil verde que aportará frescura.
Comemos con cuchara, lo que hará que aprovechemos el líquido elemento. 
Pan de barra clásica a pellizcos... ¡¡¡no os fiéis del hambre!!!
Copa de rosado Villaliz, de Bodegas Robles González... Un vino, como me gusta decir, rico para comer.
¡Tranca!