– ¿Qué sabía de Isabel Carrasco?
– Nada. Lo que leía en la prensa de su asesinato y lo que me sedujo fue precisamente que no entendía nada. Me fascinan las cosas que no entiendo y así me embarqué en el documental.
Es difícil de explicar cómo una ama de casa de 56 años se convierte en sicario – Al tratarse de un documental ¿renuncia a la ficción o también la hay?
– ¿Qué es un documental?En esa palabra entra casi todo, significa muchas cosas, hasta una película de ficción. Pero quiero dejar claro que yo, como documentalista, soy militante de la no ficción, no hay nada de ficción en ‘Muerte en León’.Hay reconstrucciones pero realizadas a título meramente ilustrativos. Lo único que buscaba era la verdad más objetiva de los hechos, aunque ser objetivo es complicado porque la verdad absoluta no existe, yo lo único que quería era ser honesto. Por ello acudí a León nueve meses antes, para tratar de escuchar a todos antes del juicio.
– ¿Qué personaje le fascinó más?– No sabría elegir. Cada una de las cuatro es un mundo. Te llama la atención primero el carácter de la asesina confesa, Montserrat, pues me resulta muy complicado entender que un ama de casa se convierta en una asesina, yo diría en una sicaria.
– ¿Triana?
– Me pareció una personalidad fascinante, una mujer muy inteligente, con una apariencia de debilidad que no se si es reflejo de la realidad.
– ¿Pudo desentrañar el papel que jugó la policía local Raquel Gago?
– Raquel es, sin duda, la personalidad más misteriosa. Pero me resulta incluso difícil de definir.
El personaje de Triana, que está convencida de salir libre pronto, es fascinante, inteligente– ¿Pudo hablar con ellas?
– A ver, con Montserrat y Triana tuvo que hablar el productor a causa de algunos problemas burocráticos que no logré entender y que impidieron que acudiera yo. Yo pude hablar posteriormente por teléfono, sabiendo lo que me había contado el productor.
– ¿Cómo las encontró?
– A Montserrat convencida de lo que hizo y a Triana segura de que saldrá en breve.
– ¿Le resultó fácil encontrar testimonios ‘objetivos’ pues la figura de la asesinada no era de las que dejaba indiferente a nadie.
– Fui muy despacio, paso a paso, desde las personas más implicadas a las que estaban más alejadas. Yno fue fácil pues ya en mi primera visita me sorprendió que veía odio hacia ella en la calle.
– ¿No encontró amigos de la presidenta de la Diputación?
– Sí, hablé con amigos y amigas, y descubrimos su lado más íntimo y amable. Parece que era más compleja de lo que parecía a simple vista.
– ¿Le resultó fácil que la gente hablara a la cámara?
– No, pero eso no me extrañó tanto pues el tema era muy complicado.
– ¿Habrá sorpresas para los leoneses?
– Yo lo vería, no le decepcionará.