Y es que Emelino Llamazares, minero de 78 años, ex miembro de la Brigada de Salvamento de Hulleras de Sabero y Anexas, dice que "es algo que se lleva dentro. Los de la brigada siempre tenemos esa cosa de la cercanía, incluso entre las familias, algo porque era un trabajo arriesgado pero también porque hemos vivido muchas cosas juntos, muchas de ellas malas, claro, va con el trabajo".


- ¿Y cuál era el secreto?
- Muchos. Hay que reconocer que ‘la empresa’ cuidaba mucho estas cosas, compraba el mejor material y los de la Brigada de Salvamento entrenábamos todo el año, dos o tres días a la semana, salíamos a las doce a una mina "simulada" y a prepararnos, para todo tipo de rescates, con grisú, agua, en sitios muy reducidos... todo. No valía cualquiera.
Y al hablar de los medios y los equipos nos recuerdan desde el MSM que la Brigada de Hulleras de Sabero "fue creada allá por 1931 por Rafael Rodríguez Arango, que ya la dotó de aparatos respiratorios de oxígeno modelo independiente Proto". Es evidente que se ha avanzado mucho desde aquellos modelos pioneros pero curiosamente en una visita a las minas asturianas (al poco Fondón) organizada por el MSM en 2017 les habló de las brigadas de salvamento Sergio Tuñón, quien ha estado al frente de la desplazada a Totalán y afirmó convencido que "la base de estos equipos sigue siendo la misma hoy que hace cien años. La vorágine tecnológica no ha significado un gran paso a mejor pues frente a los antiguos equipos mecánicos que ‘eran eternos’ y que los mismos integrantes de la Brigada podían arreglar y mantener la era de la electrónica ha conllevado un aumento de los gastos y, sobre todo, del volumen de los equipos que ahora hacen más incómodo el acceso a los sitios difíciles donde estos héroes deben realizar su trabajo". Y recordaban que aquel modelo Proto pesaba quince kilos, que es de lo que se viene hablando aún en la actualidad. Esta opinión la compartía otro miembro leonés de la Brigada de Salvamento de Hulleras de Sabero, Goyo Blanco.

Recuerda Emelino Llamazares a muchos compañeros, como el citado Goyo Blanco, a Ernesto Espinosa o Moisés Lera, Esteban Gil, José de la Flor...
- ¿Y hasta cuándo la brigada?
- Pues hasta el 91, cuando acabaron con todo en Sabero.