Oviedo siempre es una buena idea para pasar el día, y desde León te plantas allí en hora y media, así que ya tenemos destino para esta Ruta del Placer. Que ya hace frío, pero no tanto, y al solete se está de maravilla, y Asturias queda a un pasín, así que no se hable más, ¡nos vamos a Oviedo!Cuánto que ver en tierras asturianas y cuántos comederos interesantes por descubrir... Para empezar el día, un voltio por el centro: ya saben, no has estado en Ovieu si no te haces una foto con la estatua de Woody Allen y otra –a unos metros de allí– con la de Mafalda, que está en el parque de San Francisco (más chiquitina de lo que parece en las fotos). Paseo tranquilo por la calle Uría, echando un ojillo a las tiendas, y directos a la primera parada imprescindible del día, un vermut de solera en La Paloma, todo un clásico en la ciudad. Lo típico, el vermut de la casa y las gambas gigantes a la gabardina, aunque es larga la lista de picoteos en la barra (qué buenos los bígaros).Para bajar el vermut, paseo hasta la Catedral, el Teatro Campoamor y alrededores. Y vuelta al coche para ir a conocer, por fin, el destino final de hoy, muy cerquita del centro, pero hay que ir en coche (y cuesta encontrarlo, qué haría yo sin el gps del móvil...).La oferta incluye un innumerable desfile de entrantes, pero también arroces, carnes, pescados... Todo lo que se imaginen y más Apenas se tardan unos minutos en llegar a Abuli, donde se encuentra el paradisíaco enclave del De Labra, un restaurante que no es sólo eso, porque vaya finca y vaya instalaciones. Tras la muerte repentina y prematura de Chus Álvarez, es su sobrino Miguel quien ha tomado las riendas de este negocio hostelero situado en un entorno privilegiado con muchos contrastes: una zona verde con árboles centenarios fuera y espacios vanguardistas en el local. En los jardines se crían bueyes wagyu pura sangre, cuya exquisita carne puede degustarse en el restaurante (no dejen de hacerlo, qué delicia). Esa carne es una de las recomendaciones, aunque la carta tiene tales dimensiones que cuesta elegir: menú ejecutivo, menú degustación o carta, con muchos guiños a la cocina asiática.¿Qué pedir en De Labra? Algunas sugerencias: la ensalada de tomates con sus sales y aceites, preparada en sala, es un festival. También las propuestas niponas, como los nigiris de atún o el usuzukuri de ventresca, exquisito. La oferta incluye un innumerable desfile de entrantes, pero también arroces, carnes, pescados... Todo lo que se imaginen y más.No se vayan de aquí sin probar una de las carnes de buey más exclusivas del mundo, la del wagyu: en brochetas, hamburguesa, tartar o piezas a la parrilla (lomo, solomillo, picaña, presa). Para los amantes del steak tartar, brutal el de esta casa, elaborado en sala delante del comensal y absolutamente maravilloso. Si llegan al postre, dulces caseros o un cóctel. Para el bebercio, más de un centenar de referencias en la carta de vinos.-----------------------Restaurante De Labra Finca La Quinta. Abuli. Oviedo 985-117676
