

El horno de leña en el que Paolo prepara las pizzas es uno de los grandes secretos de estas casas de comidas italianas. «Los ingredientes, el horno y el cariño con el que elaboramos cada plato», explica Paolo, un tipo de Cerdeña que tras doce años en León tiene claro que aquí es donde quiere quedarse para siempre.
Lo mismo le ocurrió a Fran, que en un viaje conoció a la leonesa Graciela y hoy han formado juntos una familia que no tiene intención de moverse de la tierra de ella, ahora socia de los dos hombres.
¿Qué se come en Las Vespas? Pues ya pueden hacerse una idea: pasta, pizza... Pero qué pasta (fresca), qué pizzas (al horno de leña)... Y ensaladas, y más. Una maravilla.
Una leonesa, un colombiano y un sardo son los artífices de este proyecto empresarial que pronto ampliarán La principal novedad de La Vespa de San Martín es que han incluido en la carta risottos varios. Están buenísimos.
Pero quien vaya a cualquiera de los dos locales que no se olvide de probar cualquiera de las especialidades de la casa, con especial atención a las delicias de la tierra de Paolo, como los culurgiones (pasta rellena, exquisita) o las seadas, éstas de postre.
Si no lo tienen claro, echen un vistazo a la carta. Es larguísima. Todo tipo de pasta, rellena o no, siempre fresca. Y también una gran variedad de pizzas, horneadas y siempre con la receta de las ‘pizzas clásicas’, con bordes finitos y crujientes.
Otra opción interesantísima es el menú que tienen a mediodía, con una ensalada o un provolone para comenzar y una pizza de segundo. Eso, más la bebida y el postre o café, 10,50.
Vayan y prueben esta pizzería. Nada tienen que ver con franquicias italianas. Aquí pueden degustar el sabor de las cosas recién hechas, en su punto. Rollo ¡Mamma mia!
