La ruta de las lagunas del río Tuéjar ya ha sido publicada en estas mismas páginas, en 2023, pero con un recorrido muy diferente. En aquella ocasión se citaba su procedencia, como restos de la minería del carbón y en este recorrido también se va a comprobar esta procedencia, viendo las escombreras de las minas que hacen de contrafuertes, en algunos casos, a las lagunas. Sin embargo, en aquella ocasión la ruta partía de la localidad de San Martín, visitaba la laguna grande y subía hacia la que es algo más peueña, pero dejando las demás para internarse en el bosque que viene de Robledo y volver a la localidad de San Martín pasando una segunda vez por la laguna grande. En esta ocasión el recorrido es diferente y pasa por todas las lagunas.
En esta zona se desarrolla la leyenda de las sirenas de Valdetuéjar, que tan bien ha ilustrado Toño Benavides en sus láminas sobre las leyendas leonesas. El ayuntamiento de Valderrueda dispone en su página web de la cita de varias rutas que generalmente se encuentran en las riberas del Cea y sus afluentes y hablan de las diferentes localidades del municipio. La ruta va siempre por caminos, a veces no demasiado evidentes.
Desarrollo de la ruta
El inicio de la ruta se plantea en la localidad de Taranilla, donde se aparca al lado de la carretera y se sale en dirección a San Martín para tomar el primer camino a la izquierda pasadas las últimas construcciones.
Es un camino de tierra que va hacia el río Tuéjar, dejando a la derecha una granja y, nada más cruzado el puente, se continúa hacia la derecha. Este camino se va a seguir sin desviarse por la vega del Tuéjar, para girar a la izquierda por el camino de las Eras, que va por un vallejo con robles alrededor. Se sube un pequeño collado sin mucho desnivel y comienza una bajada que lleva hacia Robledo de la Guzpeña. Pocos metros después del comienzo de esa bajada se toma un camino que sale a la derecha subiendo hacia las escombreras de la mina que en la que se formaron las lagunas que se van a visitar.
Tras unas curvas se llega a lo que claramente es una escombrera que se mantiene como tal sin ninguna intervención, para llegar al fin a la parte más elevada por un camino en el que siempre se divisa al fondo el pico Peñacorada. Tras subir al alto se encuentran a una serie de desvíos. Con caminos poco marcados, se debe continuar por el principal y al bajar en dirección Oeste enfilando hacia Robledo y sus robledales que ya se han andado en la ruta anterior, aunque al comenzar a bajar sale un camino bien marcado que baja hacia el Vallejo del Soto, ya en dirección nordeste y que va a ir por una zona de praderas que, en época de lluvias o deshielo, suele estar encharcada. Cuando se alcanza la zona del arroyo se baja hacia la laguna, la primera que se ve, con bastante volumen de agua, muy encajonada, sobre todo en la parte de las escombreras de la mina de carbón. Las lagunas, sobre todo la última son utilizadas para el baño en el verano, no ocurre como en las minas de cielo abierto de Fabero que tienen un color especial debido a los productos químicos que contienen.
Tras visitar la primera laguna se va arroyo abajo por un buen camino para ver la segunda laguna, bastante más pequeña y con espadañas en su interior. La tercera laguna supera a la segunda en tamaño y el camino continúa hasta llegar a la última, la más grande, que se puede bordear totalmente.
Vista esta última laguna hay varias posibilidades para volver a Taranilla. Hay un camino más largo que consiste en ir a la localidad de San Martín y tras cruzarla salir por la carretera en dirección a Taranilla. Tras un tramo por la carretera se sale por un camino a la derecha que va a ir entre la carretera y el río Tuéjar hasta llegar a la altura del camino hacia la granja que se pasó a la ida, salir a la carretera y entrar en Taranilla, finalizando así una ruta más larga.
Otras posibilidades consisten en bordear la laguna y salir a los prados por el camino de los Rompidos que en parte va bajo la línea eléctrica para enlazar con el camino de ida hacia el puente sobre el río Tuéjar. El camino de los Rompidos no se ve claro, pero hay otros dos caminos paralelos que salen al mismo camino de ida y en la época de la hierba se pueden utilizar si el recorrido normal no es evidente. Al final se llega a la localidad de Taranilla, al punto de salida, donde finaliza la ruta.