Pocas horas antes de la inauguración de la exposición ‘De dentro afuera’ la artista local Cathy Thompson, impulsora de la idea de la gran exposición, reflexionaba feliz sobre cómo en un pequeño pueblo —«en invierno somos diez habitantes»— podía albergar durante este verano una gran exposición con más de 50 artistas de evidente participando.
En la inauguración el pasado sábado —con numerosos vecinos, autoridades llegadas desde diversos puntos, aunque se echó en falta al alcalde del lugar—Luis García, comisario de la exposición, explicó las claves y la filosofía de la misma. La primera clave fue el interés, más bien la pasión, de la ya citada Cathy Thompson; y la segunda que «desde el Instituto Leonés de Cultura, desde Diputación, tenemos muy claro que nos debemos a nuestros, también a los más pequeños, y queremos estar en ellos, como hoy estamos aquí; en esta escuela restaurada con gusto y buen criterio pues hay algunas restauraciones que válgame dios...».
Incidió en que era muy apropiado el lugar, la escuela, como punto de partida de la exposición ‘De dentro afuera’ pues «aquí, en esta aula, os formasteis muchos de los vecinos que hoy nos acompañáis; más bien, os acompañamos nosotros». De hecho, una vecina que estudió en esta escuela, Encarnita Fernández, cerró la inauguración leyendo un emotivo texto sobre la solidaridad, después de recordar sus orígenes familiares en estas tierras de la Tercia.
‘De dentro afuera’, del aula grande de la escuela a las pequeñas estancias, para salir al exterior de la misma y a las calles del pueblo, para disfrutar de un buen número de obras en las fachadas de las casas o en un huerto, como la impresionante obra que rinde culto a la fertilidad, además de algunas ‘señales’ en telas rojo atadas a los árboles que van marcando una ruta por las calles del pueblo, y que son un homenaje a uno de los artistas, Diego Segura, vecino de Genicera, también en Los Argüellos, como San Martín.
Al margen de explicar las características de las obras de los artistas participantes, desveló que hay entre ellas algunos homenajes que «es necesario remarcar».
El primero de ellos estaba precisamente en el aula donde se realizó la inauguración, cuyas obras colgadas en las paredes tenían un origen común: «Son obras recicladas, por así decirlo, procedentes de los materiales producidos para la muestra comisariada por Salvador Armesto, La palabra pintada». Y recordó García la situación de ‘sin techo’ que en la actualidad vive Salva Armesto, que fue noticia reciente al ‘requisarle’ a su compañera, la perra Paca.
Otro de los homenajes es para el siempre recordado Marcelino Cuevas que, señaló García, «tiene mucho sentido en ese lugar pues ya hace décadas que Marcelino recorrió todos estos pueblo recogiendo con uno de aquellos viejos magnetófonos todo tipo de historias: canciones, leyendas, mitos, historias...». Acudió al acto su familia. «En su honor se han instalado una fotografía abstracta del propio Marcelino y un retrato simbólico realizado con tratamiento digital de imagen a cargo del polifacético Salvador Armesto».
Un homenaje siempre justificado y justo fue el que García recordó a Herminia de Lucas, fallecida en 2.015, de quien destacó su «ejemplo de lucha silenciosa por los derechos de la mujer junto con Petra Hernández; todo ello por medio de una instalación que dialoga con la naturaleza articulando elementos industriales de conductos de agua y fotografía digital».
Y el más emotivo de todos, seguramente, es el que se le hace una centenaria de San Martín de la Tercia, Liz González González «vecina de la localidad que cumplirá 102 años en octubre de este año, toda una vida de trabajo, lucha y tesón; el homenaje se concreta con una obra de Luis Miguel González Colmenero que aporta un cierto tratamiento pictórico y está producida a partir de diversos tratamientos digitales de un retrato fotográfico»; una apropiada forma de dar sentido, una vez más, a la propuesta de miradas «De dentro afuera».
Unas miradas que ahora esperan otra mirada, la de los visitantes.