El restaurante Entrepeñas, en la localidad gordonesa de Geras, es un rincón ideal para darle un capricho al paladar durante todo el año. Hablar de Entrepeñas es sinónimo de embutidos y salazones. ¿Quién no los conoce? Una tabla de sus estupendos embutidos de elaboración propia, su extraordinaria cecina, la lengua aderezada con vinagre, o su famoso chorizo son solo algunas de las posibilidades para perderse en la tradición y los sabores. 
Sin embargo, el restaurante Entrepeñas tiene mucho más que ofrecer. En su carta, además de sus embutidos, destacan las elaboraciones con legumbres, y una abundancia de ensaladas con productos de temporada. Las carnes son las verdaderas protagonistas–avaladas por su calidad- y podemos encontrarnos carnes de cerdo, lechazo, cordero y vaca. Las especialidades de la casa, o lo que los clientes más demandan por su buena elaboración, son el rabo de toro, el lechazo con denomización de origen, las chuletillas, la chuleta, el solomillo, la caldereta de cordero, las carrilleras, o el pollo rural de Geras. El pescado también está presente, destacando con nombre propio el bacalao, y dependiendo de la temporada, también podemos degustar merluza, bonito o congrio. Rematan la experiencia gastronómica sus postres caseros, elaborados con mimo y cuidado, como la quesada de San Jorge o la tarta babiana, entre otros. Y qué mejor que comer en Entrepeñas acompañando nuestra comida con una amplia selección de vinos. Su carta cuenta actualmente con 54 vinos, teniendo una alta representación de caldos leoneses.
El restaurante Entrepeñas, rodeado de montañas y en plena Reserva de la Biosfera del Alto Bernesga, dispone de dos comedores con una capacidad de 120 comensales. Como placer añadido en estos días tan calurosos, también dispone de terraza. La carta destaca por la calidad de sus productos, y su cocina por saber aunar la elaboración más tradicional con innovaciones en los platos. Además, dispone de un menú diario al precio de 10 euros, y de un menú especial de fin desemana al precio de 18 euros. Montaña, gastronomía, y mimo son aliados para que si pruebas una vez, repitas. 