Música y juegos como prólogo a Santa Bárbara

La Asociación de Jubilados y Pensionistas de La Robla —de nombre Celada— tiene una larga trayectoria en la localidad, ya que pronto (en 2024) cumplirá cuarenta años de andadura. Pero, como casi todo, en la larga pandemia sufrió un parón mucho más comprensible en una asociación de jubilados de una cuenca minera. El nombramiento de una nueva Junta Directiva en el pasado mes de abril, presidida por Manuel García Viñuela, supuso ese impulso necesario para salir del letargo de la pandemia y reiniciar una nueva etapa en la que ya se han celebrado diversas actividades: Paellas de confraternidad, un par de excursiones, el tradicional homenaje a los mayores... y la cercanía de Santa Bárbara supone la llegada de unas fechas especiales para ellos, incluso en tiempos de crisis de la minería pero ha sido la vida y el oficio de muchos de sus socios. Por ello, como prólogo a esta celebración del 4 de diciembre, han programado una Semana Cultural y diversos campeonatos de juegos de cartas que desembocarán en la celebración de la patrona de la minería con los tradicionales pinchos o la entrega de los trofeos a los ganadores de los diversos campeonatos disputados estos días.

Los campeonatos de tute y brisca ya habían sido una vieja costumbre de la asociación que ahora regresa, pero la Semana Cultural es una nueva iniciativa que en el ánimo de los responsables de Celada está la idea de seguir potenciándola en el futuro y con otras actividades a lo largo del año.

La Semana Cultural de este año tiene este sábado (a partir de las 19.30 horas, en la sede del Hogar del Pensionista con entrada libre) una cita importante y ‘entrañable’ para los socios pues será uno de ellos el protagonista; será un concierto de rabel de su socio y directivo Mario González Álvarez, el popular Jilguerín de Casares, que prepara un repertorio musical y de historias que contará muy apropiadas a la cercana celebración de Santa Bárbara, hechos y personajes de La Robla, donde vive, y de su comarca natal, Casares de Arbas.

Hay optimismo en la Asociación, que ha sumado en los último tiempos un buen número de nuevos socios, que ya superan con claridad la centena y trabajan para llegar pronto a los 150; animados además con tener una magnífica sede.