Las obras en esta localidad del municipio de Villamañán se han centrado en la antigua capilla bautismal, también conocida como capilla de San Juan, con la conservación y puesta en valor tanto del artesonado mudéjar del siglo XV como de los decorados que adornan las paredes de la capilla.
La capilla, situada en la iglesia de nuestra Señora de la Asunción en la localidad de Villacé, tiene 25 metros cuadrados en planta cubiertos por una armadura policromada de par y nudillo, a cuatro aguas. Las paredes de la capilla están decoradas con pinturas murales conservadas bajo la capa de yeso. Situada a los pies de la nave del Evangelio, la capilla se alza sobre los restos de una edificación precedente, cuyos vestigios aún son visibles en los muros norte y oeste. Hacia el año 1500 este espacio se incorporó al nuevo templo que se estaba construyendo y pasó a funcionar como una capilla con advocación a San Juan Bautista, San Gregorio y San Pelayo, gestionada por una cofradía homónima.