La Escuela de Arte y Superior de Conservacón de Bienes Culturales de León atesora desde hace tiempo el escudo de la sillería del monasterio de Villaverde de Sandoval. Este lunes el centro sacó lustre en su sala de exposiciones a una cara renovada de laobra, que, según lo indicado en su estudio histórico-artístico, "se ubicaría probablemente en un periodo de tiempo que se desarrolla entre el final del renacimiento y la parte media del barroco"; un dato que responde a detalles como "la decoración de volutas y elementos vegetales como el remaje del marco, así como el udo del óleo en el retrato central, el estilo de dicho retrato y su temáticamente abiertamente religiosa".
Tanto el estudio como la restauración son fruto del trabajo del alumno Pablo Romero Riesco, que ha invertido su periodo de prácticas en trabajar sobre la pieza que yacía sometida a una gruesa capa de suciedad y a la presencia de xilófagos en el interior del templo religioso. El escudo representa a San Pablo; un emblema exento de equívocos debido a que "se le representa como un varón calvo, con una barba poblada y con una espada en la mano derecha que representa su martirio".
"Dificultades muy grandes no encontré", explicó el restaurador, que contó con la supervisión de algunos miembros del cuerpo de docencia de la escuela. "Sí que es verdad que fue una cosa que me sorprendió porque pensé que me iba a costar bastante más", aseguró sobre un proceso que le ha llevado más de dos meses y medio: "La dificultad más grande fue probablemente lo relativo a la pintura, que estaba bastante pulverulenta, le faltaba el aglutinante al pigmento y, básicamente, eso dificultó las labores de consolidación a la hora de restaurarla".
El trabajo de Pablo, apoyado en la réplica de pequeñas dimensiones elaborada por Josua Alsina a modo de soporte expositivo, sirve para alumbrar este escudo restaurado, que ha pasado por labores de limpieza superficial y húmeda, consolidación, desinsección, estructura del reverso, reintegración volumétrica, tratado de clavos, estucado de lagunas, reintegración cromática y capa de protección. El resultado, presentado durante la jornada 'Artificio creativo: la Inteligencia Artificial en el mundo del arte', guarece ahora en el seno del centro, a la espera de su próximo traslado a su hogar primigenio: el monasterio de Santa María de Sandoval.