El pastel de patatas con chorizo de Marcelo Ramón

Basado en las patatas asadas a lo ‘jools’, de inspiración británica, proponemos este pastel que con su añadido de chorizo, adquiere un marcado carácter leonés. No olvidemos que este embutido ostenta el reconocimiento de marca de garantía, ‘Chorizo de León’. Quiénes lo prueban, se fidelizan instantáneamente.
Vamos a nuestro pastel: pelamos unas patatas y las partimos en rodajas de unos 3-4 milímetros. Las ponemos en un bol con romero y ajo picados. El zumo de un cachete de limón, salamos y unas vueltas generosas de molinillo de pimienta negra. Chorretón de aceite de oliva y removemos muy bien para que todo quede perfectamente impregnado. Esto hará que resulten espectaculares. Reservar.
Sartén con papel de horno arrugado, mojado y estirado. Encima iremos colocando las patatas reservadas, en capas horizontales. Entremedias, situamos unas lonchas de chorizo libres de la piel y más patatas, hasta terminar todas. Aplastar con la mano para que se peguen bien las capas como si quisiéramos formar una única patata gigante. ¡¡¡Jejeje!!!
Cubrir con papel de aluminio. Horno precalentado, 90 minutos, a 180°.
Sacar y aplastar para que las capas no se despeguen, con un plato. Poner un peso. Mínimo enfriar dos horas.
Volteamos la sartén sobre la tabla. Quitamos el papel. Untar de mantequilla la sartén.
Cortar en tiras de unos 2 cm y tornar para cambiar el sentido de las capas. Colocar las tiras giradas apretando y apelmazando sobre la sartén engrasada. Una vez colocadas poner un chorrín de aceite y al infierno caliente a 220° durante 30-40 minutos hasta que estén doradas y deliciosas.
Textura crujiente, voltear en la fuente y a servir ¡¡¡multitud de capas!!! Perfectamente hechas. Un poco de esperanza verde desde lo alto. El paraíso de lo crunchi tostado.
Sin peros, color, sabor, textura. ¡¡¡Me siento realizado!!! Y con un producto de la tierra, ¡¡¡CHORIZO DE LEÓN!!! Puro placer de dioses. Se cumplieron todas las expectativas.
Si ponemos pan, no me levanto.’
Tinto prieto picudo de DO León, Carroleón de Bodegas Pardevalles... ¡¡¡Todo queda en casa!!!
¡Tranca!