Una pastora de novela y una salvadora de una raza

Violeta y Ángela del Carmen son ganaderas de ovino, de diferente raza, y a su vez activas participantes de Ganaderas en Red, un grupo que se va extendiendo por toda España y que se ha convertido en una gran red de apoyo entre todas ellas

09/03/2025
 Actualizado a 09/03/2025
A la izquierda, Violeta Alegre, y a la derecha, Ángela del Carmen Santiago. | L.N.C.
A la izquierda, Violeta Alegre, y a la derecha, Ángela del Carmen Santiago. | L.N.C.

«En el grupo —Ganaderas en Red— hemos creado una gran red, nunca mejor dicho, de complicidades que además de dar visibilidad a nuestra existencia en un mundo en el que somos muy invisibles nos resulta muy práctica. Por ejemplo, te surge un problema en la ganadería, lo cuentas en el grupo, y unas te aconsejan según lo que hicieron cuando les ocurrió algo parecido, también hay veterinarias que te ofrecen la visión profesional... Estamos creciendo mucho». 

Así explica Ángela del Carmen Santiago Guerrero —ganadera trashumante de solo 25 años que sube en verano al puerto de Cubillas de Arbas— alguna de las ventajas de pertenecer al grupo Ganaderas en Red, que ya integra a mujeres de toda España y con un buen número de leonesas entre ellas. 

Además de dar visibilidad al colectivo, como ella misma apuntaba, están en permanente evolución y van sumando iniciativas. Están presentes en todas las plataformas, graban vídeos, canciones, un seguido podcast y la última incorporación es un blog, que han bautizado como Abrir la ventana: «Esta ventana ya estaba construida pero es ahora cuando la abrimos para que podáis asomaros. A través de este blog queremos brindaros la posibilidad de conocer más quiénes somos Ganaderas en Red y abordar a través de la palabra tantas realidades y situaciones que nos nutren, nos planteamos, creamos... Compartir y construir experiencias y pensamientos que inviten al diálogo y a imaginar, proyectar y generar lugares desde los que pensar el mundo, los mundos, que queremos».

Allí van volcando sus opiniones, artículos... ‘Mujeres entre lobos’, ‘Paridad sí, pero no así’;una defensa clara de la ganadería extensiva que practican todas ellas... Trabajadoras que se llaman a sí mismas ‘Mujeres de tierra, viento y ganado’:«Somos un grupo de mujeres ganaderas y pastoras de extensivo de toda España. No somos un prototipo de nada, somos mujeres, diferentes, única cada una, como el paisaje que nos rodea. Somos universitarias, ex-bailarinas profesionales, ganaderas desde la infancia, ejecutivas en otra vida que ya no queremos recordar...».

«Somos un grupo de mujeres ganaderas y pastoras de extensivo en España. No somos un prototipo de nada», dicen de sí mismas. | GANADERAS EN RED
«Somos un grupo de mujeres ganaderas y pastoras de extensivo en España. No somos un prototipo de nada», dicen de sí mismas. | GANADERAS EN RED

Dos de ellas son noticia reciente. Seguramente más pero éstas están vinculadas a León. Violeta y Ángela del Carmen. Violeta Alegre ha sido la inspiración para uno de los personajes principales de la última novela de la bañezana Marta del Riego Anta, Cordilleras. Ángela del Carmen es la vicepresidenta nacional de la Asociación Nacional de Criadores de Ganado Merino, elegida en la última asamblea, en la que fue nombrado presidente el leonés Álvaro Álvarez Redondo. «Nos une otra cosa con Álvaro, los dos somos ganaderos de merina negra, una raza en peligro de extinción y con la que nosotros estamos encantados». 

Ángela del Carmen Santiago Merino es extremeña de Alconchel. Su padre era funcionario de Correós y le jubilaron por lo que compró un pequeño rebaño, que a Ángela le encantaba estar con él. Hasta su pueblo bajaba de trashumante el leonés Dani, su actual pareja, y «yo me dije, si él puede... yo también y ahora tenemos una explotación de titularidad compartida de casi mil merinas negras».

- ¿Porqué negras?
- Por mantener la genética y la raza, además nos gusta y nos va bien.
- Está en peligro de extinción y la merina blanca no... 
- Ya ves, el color, incluso en las ovejas. Tanto la lana, cuando valía dinero, como la piel negra tenían peor mercado que la lana y la piel blanca y fueron desapareciendo. Nosotros vendemos para cría y carne. 
- ¿Y la estancia en la majada de Cubillas de Arbas?
- Fenomenal. Es el pueblo de Dani y allí de ganadería saben mucho. Como somos los únicos de ovino tenemos mucho pasto, muy buen puerto... estamos encantados.

Ángela del Carmen con su rebaño de merinas negras.
Ángela del Carmen con su rebaño de merinas negras.



Violeta Alegre es una histórica de la trasterminancia, de Abelgas de Luna en la montaña a San Pelayo, cerca de Veguellina, en la ribera. También activa participante de las actividades de Ganaderas en Red; sin embargo lleva una temporada «fuera de juego» con un contratiempo de salud que incluso la llevó a estar hospitalizada, aunque ya está nuevamente en casa. «Esta temporada le ha tocado a Gregorio dar el callo por los dos, atendiendo a los dos rebaños, en plena paridera... a ver si vuelvo pronto, que lo he pasado mal, sobre todo con los vértigos».  

Violeta, que ya ha sido reconocida en diversas ocasiones, es una apasionada de la lectura y en este tiempo ha podido disfrutar de una novela muy especial para ella, ‘Cordillera’, de Marta del Riego Anta. «La tengo que volver a leer porque con la enfermedad no la he podido disfrutar del todo, volveré a ella pues me ha gustado mucho y me apetece mucho».

- Incluso sales en ella.
- Sí es cierto que hay una pastora para cuyo personaje Marta me vino a ver, hablamos largo y tendido, del oficio, de mí... sí me he reconocido en la pastora de la novela.

De hecho la escritora bañezana fue a ver a Violeta Alegre para llevarle la novela dedicada, y lo que le escribió allí ya lo dice todo: «A Violeta, una heroína del siglo XXI...».

Violeta Alegre con la escritora Marta del Riego Anta.
Violeta Alegre con la escritora Marta del Riego Anta.

Marta del Riego anda estos días de gira (en Valencia estaba) de presentaciones de la novela y habla del personaje de Nídia, que así se llama la pastora para cuya creación se inspiró en Violeta. «Es, como a mí me gusta, una novela negra, escrita con tres voces, tres personajes:una pastora trashumante, un biólogo y una osa... Para el personaje de la pastora —Nídia, un precioso nombre de Babia y Luna—hablé con Violeta, estuve con ella en Abelgas y San Pelayo, y me ayudó muchísimo en la construcción del personaje para que fuera creíble. Además, como se queda en Veguellina, la tenía muy cerca de casa, en La Bañeza». 

Lo más leído