Pico de Santiago desde Piedrasecha por los Calderones

Ruta circular por los Calderones, Santa Marta y el Fito.A ese cordal le llaman Peñas Martas, que está por encima de donde se supone que estuvo el pueblo de Santas Martas en las crónicas de la guerra civil cuando hubo combates allí

28/06/2024
 Actualizado a 28/06/2024
En la cumbre.  | MARCE FERNÁNDEZ
En la cumbre. | MARCE FERNÁNDEZ

Piedrasecha es un bonito pueblo de montaña perteneciente al municipio de Carrocera, que mucha gente conocerá por encontrarse allí el famoso desfiladero de Los Calderones, un fascinante paraje de montaña a media hora en coche de la capital leonesa y, por tanto, un destino recurrente para las excursiones que tienen como propósito disfrutar de una jornada en la naturaleza sin tener que hacer un largo desplazamiento. La arquitectura de la localidad llama la atención nada más entrar en el pueblo, ya que sorprende un edificio con forma de castillo que es una casa rural.


En el caso de realizar la ruta con sillas tipo Joëlette, hay que remarcar que el primer tramo del desfiladero es un desafío en sí mismo y ralentizará el progreso, dada la altura de los bloques de roca que hay que ir salvando, por lo que hay que contar con un equipo de montañeros voluntarios muy capacitados para conducirlas, y que tengan esa parte del tramo muy estudiada. Desde Santas Martas la subida al collado del Fito y la posterior llegada a la cima, se puede hacer sin problema técnico alguno, aunque no exenta de esfuerzo debido a la constante pendiente.  Para las sillas es aconsejable regresar por el mismo trayecto de subida tras alcanzar la cima, es decir, volviendo a Piedrasecha por el desfiladero de Los Calderones, ya que las sillas encontrarían problemas, en el caso de realizar el resto de la ruta que se propone para hacer un recorrido circular, ya que habría que pasar por tramos de vegetación espesa que dificultarían su paso.
 El guíado de deportistas ciegos requerirá también de cierta pericia en el tramo más trialero del desfiladero, aunque no existe ninguna otra dificultad para que puedan realizar la ruta completa en modo circular.

 

Imagen 04 Escalera Cueva de las Palomas al desfiladero (MF)
Escalera Cueva de las Palomas al desfiladero. | MARCE FERNÁNDEZ

El ascenso al Pico de Santiago podría tener otras variantes, en caso de que por razones técnicas, o por estar la roca mojada, no se quiera subir por desfiladero de  Calderones, como la subida desde Barrios de Gordón por la pista que llega hasta el collado del Fito, por donde transcurre el Camino Primitivo, que puede ser una alternativa más cómoda a tener en cuenta si se pretende realizar el ascenso al Pico Santiago con sillas Joëlette, aunque los montañeros que conducen este tipo de sillas simpre querrán hacer que la persona a la que se transporta disfrute de un escenario natural tan impresionante como el que nos mostrará el desfiladero. 

Desarrollo de la ruta


Se parte desde la salida del pueblo de Piedrasecha, a través del camino señalizado que lleva al desfiladero de Los Calderones, pasando al lado de una curiosa formación de cuarcita llamada  el Serrón, antes de llegar a los cortados de caliza, donde se encontraba una fuente que mana de la montaña, de las de beber «a morro» y donde el río se ocultará (este año no mana la fuente). 


Los bloques de roca que se encuentran por el desfiladero obligarán a caminar con precaución, especialmente si se hace en condiciones de humedad.


El estrechamiento del desfiladero de Los Calderones comienza en un punto en el que existe una mesa provista de una gran losa de piedra que fue construida a modo de altar, destino de los fieles a la romería de la Virgen del Manadero, que (desde 1988) se celebra el último domingo de julio y cuya imagen se encuentra más arriba, en la cueva de Las Palomas, a la que se llega subiendo unas empinadas. Merece la pena detenerse a visitar la cueva, especialmente si la ruta se hace de modo circular y no se vuelve a bajar por Los Calderones.


El desfiladero, que se recorrerá después, constituye un verdadero museo geológico al aire libre, rodeado de paredes en las que también hay distintas vías de escalada deportiva. A partir de la fuente del Manadero desaparece el río que ha acompañado desde Piedrasecha, ya que su curso será subterraneo en ese tramo, salvo en épocas de deshielo o de grandes precipitaciones, en las que cursará por el medio del desfiladero haciéndolo intransitable, debiendo buscar entonces las distintas alternativas para llegar a donde concluye y el valle se abre, lugar en el que, según cuentan, se encontraba el poblado de Santas Martas, con leyenda propia que habla del motivo dramático de su abandono, aunque apenas se distingue allí una cabaña pastoril. 

 

Imagen 07 Paso de los Calderones (VG)
Paso de los Calderones. | VICENTE GARCÍA

Éste sería punto de partida para otras interesantes cimas, como Los Machaos, La Viesca, los Llamargones, el Pico Feliciano y otro buen número de atractivos itinerarios, pero en esta ocasión se va a seguir la pista a la derecha para llegar al collado del Fito, desde donde se continuará por un camino que asciende en dirección sureste, para llegar a un segundo collado y, cuando el camino comienza a bajar, se sale por la izquierda siguiento los hitos para realizar un recorrido en diagonal hasta llegar a la base de la montaña y desde allí se comienza un corto ascenso, también señalizado con hitos, para coronar la cima del Pico Santiago, a 1.797 metros, donde se van a encontrar vestigios bélicos como antiguas edificaciones para las tropas, trincheras, puntos de observación, etc. que formarían parte de las muchas fortificaciones que se conservan en la Cordillera Cantábrica, del llamado Frente Norte.  Las vistas que ofrece su cima abarcan desde las cumbres más cercanas hasta la parte más meriodional de la provincia, ya que las vistas al sur  asoman a la ribera del Luna y, más allá, a la meseta.


Bajando del pico se pasará por la fuente de la Sierra, que se encuentra a una altitud considerable, 1.640 metros, y que al menos data del año 1935, tal y como se puede leer en una inscripción en cemento, y que seguramente es ya una restauración de un manantial conocido por los pastores desde la antigüedad, aunque el pilón que hoy se observa allí, para abrevar el ganado, es de construcción más reciente. Luego se baja por el amplio valle de brezos y piornos que hay bajo la fuente, por el llamado paso de Los Republicanos, donde dicen que era transitado para abastecer las posiciones defensivas, hasta llegar al collado de Las Pinganeras, por una vereda estrecha por la que se cruza un pequeño bosque de robles que se abrirá pronto, para enseñar las peñas calizas tapizadas de vegetación de montaña, como enebros rastreros y sabinas, y bajar a continuación, casi en línea recta, por el cortafuegos del Estepalón, hasta encontrarse con el camino rural que enlaza Piedrasecha con Cuevas de Viñayo, y que se toma en dirección oeste, en descenso hasta Piedrasecha, para finalizar la ruta en el bar del Manadero, punto del que se ha salido.


Esta ruta, en modo circular, tiene un recorrido de 15´5 kilómetros y 640 de desnivel positivo, por lo que es necesario contar con una jornada completa para concluirla, especialmente si se pretende hacer en modo inclusivo llevando sillas especiales. Hay que contar también de que apenas cuenta con señalización (en especial la bajada), por lo que es interesante llevarla grabada en el dispositivo GPS o realizarla acompañados de personas que la conozcan bien.

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