Coincidiendo con el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer, la artista y responsable de la programación cultural de Espacio Vías desde 2009 propone una serie de consideraciones plásticas que tienen que ver con este tipo de violencias.
Lo hace, en colaboración con la Concejalía de Acción y Promoción Cultural, a través de un desfile de moda textil que, en esta edición, lleva por título ‘Eje de abscisas’ y que viene enmarcado en la colección de Esther Calzado Mayo, ‘Visible lo invisible’. El de Mayo es un proyecto de sensibilización sobre desigualdad de género, ya sea coyuntural, estructural o familiar, que se inició hace veinticinco años y sigue en proceso. Los dieciocho primeros trajes fueron creados para la exposición colectiva Mujer, Arte y Compromiso y presentados por primera vez en el Museo de la Ciudad de Madrid (año 1998) y posteriormente en otras ciudades españolas; Badajoz y Burgos (1999), Valencia y Jaca (2000), Granada (2001), y Santiago de Compostela (2002).
«Algunas situaciones de desigualdad son invisibles igual que el currículum oculto de nuestras transmisiones culturales o educativas, que permiten perpetuarlas, y los esteriotipos de género que las hacen tolerables y que son el origen de comportamientos machistas y demás violencias, incluidas las institucionales», señala la artista sobre su propuesta ‘upcycling’, realizada con materiales reutilizados, recuperados y reciclados, que pretende desvelar esta realidad invisibilizada y «avanzar en una sociedad igualitaria».
En sus inicios, la propuesta versaba únicamente sobre dos temáticas, «la mujer objeto y la doble jornada laboral», destinando el desfile a «un análisis de la cosificación del cuerpo femenino y del coste personal de la mujer al acceder a la vida laboral». La colección de Calzado presentaba así el binomio por antonomasia al que se ve sujeto el estereotipo femino: «la crianza fácil o la maldad femenina», «la mujer objeto de deseo y de pecado». Todo adornado con el uso de objetos cotidianos, que contribuyen a facilitar el mensaje: «la crítica a los piropos callejeros se hace así a través de un bañador negro con una diana a la altura del culo en la que está clavada una flecha cuyo culatín es un ojo».
Fue una cuestión personal lo que provocó que la artista retomara el proyecto tras catorce años. Su compromiso feminista, igual que el deseo de mostrar su obra en León, hizo que Calzado diese continuidad a la propuesta, añadiendo algunas perspectivas nuevas en este ‘Eje de abscisas’, dejando espacio a la denuncia de «la falta de educación sentimental y la violencia psicológica que, aunque no lo parezca, están íntimamente relacionadas».
De esta forma, la obra textil y performativa de Esther Calzado Mayo tiene su puesta de largo este sábado, día 25 de noviembre, en el Auditorio Ciudad de León, que desde las 21:00 abre sus puertas a los asistentes de forma libre y gratuita, previa recogida de un máximo de dos invitaciones por persona.