Como si de un duelo se tratase, ¡¡¡quién ganará!!!. Enfrentamos, por un lado, la carne más consumida en nuestra sociedad, el pollo, y en la otra esquina, el bonito del norte, pescado siempre presente en mi cocina..., lo que viene siendo, un mar y montaña. Este tipo de platos, mar y montaña, son muy comunes tanto en la cocina catalana, como en las desplegadas por el norte peninsular... Esto parece literatura, pero lo cierto es que ya lo cocinaban las guisanderas hace muchos años, entre ellas, ¡¡¡mi madre!!!
Sartén con aceite para dorar, por separado, ligeramente salpimentados y enharinados los escalopines en que habremos convertido una fresca pechuga de pollo y un terso solomillo de bonito. Reservad en una tartera.
En el aceite que hicimos las frituras, preparamos la salsa. Mi bresa más utilizada, la compuesta por ajo, cebolla, puerro, pimientos rojo y verde y zanahoria, todo picado, no hace falta que sea muy fino, pues después la pasaremos por el túrmix. Una vez pochadas las verduras, una minipuntina de pimentón, una cucharada de harina, chorrín de vino blanco, un poco de salsa de tomate y aromatizar con una hoja de laurel, una chispa de gracia con una diminuta guindillina... cocinar con un poco de caldo y triturar.
A la cazuela donde esperan las proteínas, pasando la salsa por un colador o chino, hervor muy lento con movimiento de vaivén de la rustidera tapada 10-12 minutos... ¡¡¡que aroma!!!
Servimos con un flan de arroz basmati, al que habremos perfumado más con un poco de romero. Un par de tronchas de bonito y otras dos de pechuga de pollo... Todos querrán más. Algunos, yo entre ellos, tomaría la salsa con cuchara. Esto significa que el pan, abundante, es ¡¡¡imprescindible!!!
Vino, blanco albarín de la D.O. León, Fáfila Pétriz, de la bodega Pincerna... otro descubrimiento gracias a Romi, la musa de los vinos, desde su vinatería, Amarone Vinnería. Frescura, elegancia y complejidad.
Ni vencedor, ni vencido... resultado espectacular con empate a los puntos... Para sentirse orgulloso... ¡¡¡Casi se me escapa un lagrimón!!!
¡Tranca!