Al elegir 'El árbol de los toronjos' como título ya ofrece alguna de las claves de este montaje que ahora lleva a La Vid. "No es un cuentacuentos al uso; es una historia muy personal, con tintes autobiográficos incluso, en el que voy intercalando historias que en muchos casos me han sucedido, con cuentos o leyendas y, sobre todo, con música y canciones".
Muchas de estas historias personales que Rodrigo Martínez les cuenta a los chavales —también es apto para mayores— que acuden a escuchar y ver‘El árbol de los toronjos’ le han ocurrido en las numerosas entrevistas que ha realizado por todos los pueblos de la provincia paraque le cantaran canciones tradicionales de todas las comarcas; de ahí que la base musical del montaje sea precisamente esta música leonesa. "La mayoría de las cosas que les cuento, excepto unas pocas de la tradición oral, me han ocurrido a mí, por lo que tienen más fuerza, las conozco mejor, como todo lo que has vivido".
Y a ella suma otra de sus características como músico, la increíble capacidad de Rodri para tocar numerosos instrumentos, y así se los va mostrando a los chavales y contando sus características, alejado de un tono 'profesoral o académico' para enganchar mejor a los chavales. "En esa faceta juegan un papel muy importante los instrumentos, que voy utilizando y explicando. Así, a bote pronto, recuerdo que utilizo la chifla y el tamboril, el pandero (pandeiru cuadrao), la pandereta, el rabel, el acordeón diatónico (curdión) y, por supuesto, la voz, que juega un papel muy importante, con las canciones que les canto y que te permiten llegar mucho mejor a ellos, ganarte su atención".
'El árbol de los toronjos', con una duración de 45 minutos, es un montaje en el que música y palabra se unen en el ámbito de la tradición oral leonesa, para trasmitir "nuestra cultura, costumbres y forma de vida. Un cuentacuentos que recupera la memoria de nuestros ancestros, al mismo tiempo que voy explicando con cada instrumento sus características generales y sus peculiaridades, así como los secretos de su fabricación, uso o función en la sociedad".
- ¿Cómo se podría definir ‘El árbol de los toronjos’?
- Sin parecer presuntuoso como muy tipo yo, muy mío, de Rodri... por eso creo que me sale bien.
También para mayores
Este montaje de Rodrigo Martínez está dirigido, como ya ha explicado, pero también tiene en «su repertorio» otro cuentacuentos similar pero pensado para el público adulto. "La estructura es un poco parecida pero cambia el argumento, la trama, la forma de dirigirme al público y, sobre todo, que se trata de un espectáculo interactivo, en el que el público puede participar de la manera que consideremos oportuna o, simplemente, haciendo preguntas sobre lo que les estoy contando, que yo le responderé, si las sé... y si no, pues a la Wikipedia, que no dejará de decirnos algo al respecto".Y hablando de otros proyectos de Rodrigo Martínez lleva meses trabajando en un nuevo trabajo, componiendo y arreglando para que vea la luz un disco "muy personal" en que "mantengo la base de los temas tradicionales que hemos ido recuperando pero dándoles un aire más actual, con cambios que yo mismo realizo en las armonías, en las melodías, se podría decir que avanzando en la linea de Tarna... la verdad es que ya tengo un buen número de temas, suficientes para un nuevo disco, pero lo que me ocurre es que le doy excesivas vueltas a las cosas, tengo que tirar para adelante e ir cerrando temas", dice Rodrigo Martínez, que no aventura sin embargo cuando verá la luz este futuro trabajo. "Ya es un paso tomar la decisión de dejar de darle vueltas a la noria".
Y otro de los proyectos en los que también está implicado en la actualidad Rodri es el que han llamado 'Tirando del hilo', que define como "una sutil mezcla de música, poesía y teatralidad", en el que colabora con gente conocida en el panorama cultural leonés, como la actriz Guadalupe Díez, el poeta y activista cultural Víctor M. Díez y el propio Rodri. "Tiramos de un hilo largo,que nos lleva a los romances, las coplas, las tradiciones, los oficios, las costumbres, las leyendas, los juegos infantiles o las voces de nuestros mayores…".