De entre todas las disciplinas artísticas, quizás las relacionadas con la música sean de las menos visibles en nuestro panorama artístico, tal vez porque no se nos educa especialmente como espectadores para disfrutarla, tal vez porque nos falten referentes próximos a nosotros ya que, en la mayoría de las ocasiones, triunfar en ellas lleva consigo un voluntario destierro desde la etapa misma de formación. Esa es la circunstancia de la leonesa Eva Juárez, que se ha hecho todo un nombre en el panorama internacional, consiguiendo con uno de sus trabajos discográficos, ‘Lágrimas, Amor…’ dedicado al compositor barroco español Sebastián Durón, además de otros destacados premios, la nominación como ‘Mejor Disco de Música Clásica’ en los Grammys Latinos de 2016.
Las dificultades con las que alguien que desea dedicarse a la música de forma profesional puede encontrarse a lo largo de su formación se convierten a veces en una verdadera carrera de obstáculos. En el caso de Eva Juárez, comenzó cuando, con 5 o 6 años, en el Conservatorio leonés, le dijeron a su madre que no tenía aptitudes musicales. Sin rendirse, buscó para ella otras opciones y se incorporó a las aulas corales de San Claudio, incluso un año antes de lo que solían hacerlo sus compañeros. No las abandonaría en toda su etapa escolar, participando incluso en otros coros. Posteriormente, tras una formación por libre, se desplazó a Oviedo para realizar en su Conservatorio Superior los estudios de canto. Al terminar esta fase se dio cuenta de que le faltaban cosas en el sistema español, y optó por irse a Zurich como la mejor opción, donde se licenciaría en Canto en la Hochschule für Musik und Theater. Allí coincidiría con otros alumnos españoles, siendo sin embargo la primera que lo hacía como cantante, aspecto que causaba bastante sorpresa pues dice que desde aquí no somos conscientes de «la notable fama que tienen los cantantes españoles». Además de su formación oficial, y respondiendo a la idea de que para no descender hay que seguir siempre avanzando, ha recibido clases de prestigiosos cantantes, que le ha permitido hacerse con un poso que le permite afrontar los diversos proyectos en los que se involucra. De cada uno de ellos ha ido aprendiendo aspectos diferentes pero entre todos ellos le gusta señalar a Carlos Mena «porque además me permitió abrir muchísimo la mente».


Y hablando de investigación, este es otro de los campos en lo que participa Eva Juárez, de ahí la transcripción de partituras realizadas para ya el mencionado disco sobre Sebastián Durón o su participación junto a Paula Ríos en el proyecto ‘Viento de plata’ sobre Jesús Bal y Gay y Rosa García Ascot, dos representantes de la Edad de Plata (Generación del 27), un trabajo en el que combina musicología e interpretación. Sin duda una figura muy completa dentro del panorama musical actual. Descúbranla.