Los leoneses de 'Allá arriba en aquel alto'

Allá arriba en aquel alto / En aquella sierra montina / Donde cae la nieve a copos / Y el agua serena y fría». Con esta estrofa de una vaqueirada recogida en la montaña leonesa empieza el recorrido por la nueva exposición del Museo de la Indumentaria Tradicional Leonesa (Mitle) de Valencia de Don Juan. Es el primer verso el que le pone título a una muestra que se centra en las formas de vestir tradicionales de las comarcas leonesas de Omaña, Luna, Babia y Laciana. Desde el sur de León nos llevan así a la Montaña Occidental Leonesa a través de 160 piezas, algunas de los fondos propios del Mitle y otras cedidas para la ocasión por los fondos del Instituto Leonés de Cultura, la Fundación Sierra Pambley, la Fundación Octavio Álvarez Carballo y el Ayuntamiento de Riello.

Cada pieza expuesta presume de un gran valor etnográfico pero también de su correspondiente historia, la que cuenta cómo vestían hace más de un siglo los paisanos leoneses pero también el cómo vivían en la fría montaña. Porque esas pequeñas madreñas que se ataban con un lazo a los pies de los niños que en su día las calzaron hablan de las gélidas nevadas como de la trashumancia hablan un zurrón y una tosca carlanca de las que se ponían en el cuello de los mastines para evitar los ataques del lobo. Junto a estas piezas también se pueden contemplar unas albarcas y unos escarpines, muy característicos de la indumentaria tradicional de la Montaña Occidental Leonesa que se caracteriza por su sobriedad y elegancia. Pero no renunciaban aquellas modas a piezas que se salen de lo común por su colorido y exuberancia como también se puede contemplar en la nueva exposición del Mitle que estará disponible para visitar hasta el mes de mayo del próximo 2022.

Estas indumentarias reflejan las relaciones sociales y económicas de las gentes que habitaron estos valles montañosos. Existe una gran similitud entre las indumentarias leonesas y las de los vecinos concejos de Asturias, especialmente en el caso de Laciana y Cangas del Narcea. También son numerosas las piezas procedentes de Extremadura, que llegaron hasta estas tierras acompañando el paso de la trashumancia. Coloridas sayas, preciosos pañuelos, funcionales faltriqueras y elegantes joyas originarias de Cáceres o Salamanca se integraron en la vestimenta propia de los montañeses de León.En el recorrido por la muestra, su guía, Pedro Manuel Pérez, cuenta a los visitantes numerosas historias y anécdotas que envuelven cada pieza como las ropas que viste una pareja de maniquís que recrean, con todo lujo de detalles, la ropa que un grupo de leoneses lució en la boda de Alfonso XII y María de las Mercedes de Orleáns a la que se desplazaron para cantar y bailar en la calle y ante los reyes.

‘Allá arriba en aquel alto’ es un recorrido por 100 años de historia de la indumentaria a través de 160 piezas procedentes de estas cuatro comarcas montañesas, de poblaciones como Caboalles de Abajo, Orallo, Villager y Villablino en Laciana, Piedrafita de Babia, Candemuela y Torrebarrio en Babia, Riello, Soto y Amio, Villavaldrín y Curueña en Omaña, y Los Barrios de Luna, Abelgas de Luna, Adrados y Callejo de Ordás en Luna. Pretende ser un punto de partida para la investigación acerca de la indumentaria de estas comarcas y un merecido homenaje a las generaciones de orgullosos montañeses que hicieron, adquirieron, conservaron y legaron este precioso patrimonio material que es la Indumentaria Tradicional Montañesa.

Del Museo de la Indumentaria Tradicional Leonesa cabe destacar que fue el primero en recoger una colección museográfica que se abrió en la provincia de León dedicada al estudio y exhibición de la indumentaria y joyería populares. Se inauguró en 2007. Está ubicado en la Casa de la Cultura de la localidad coyantina y el Ayuntamiento espera pronto poder dedicarle un edificio en exclusiva para mostrarlo «como se merece». Este centro museístico es de carácter municipal. Es fruto de la colaboración entre el Ayuntamiento de Valencia de Don Juan y los propietarios de la Colección Martín-Pérez, cuyas piezas han pasado a ser fondos permanentes de la institución con más de 3.500. Entre ellas las hay de los siglos XVIII, XIX y XX. La colección es fruto del trabajo de recopilación que durante años han realizado los coleccionistas y que les ha llevado a recoger piezas de la práctica totalidad de la geografía leonesa, considerándose una de las colecciones más completas e importantes de la provincia, la que ahora cruza la provincia hasta «Allá arriba en aquel alto / hay un niña vaqueira; / quién fuera pastor de vacas / para guardarlas con ella».