En la provincia leonesa figuran como zonas autorizadas el lago de Carucedo, dos zonas en el río a su paso por Cimanes del Tejar, dos en el río de Llamas de la Ribera, una en el río en Vega de Espinareda, una en el río de Igüeña, una en el río a la altura de San Martín de Moreda y una más ubicada en el río Cúa a su paso por Cacabelos, aunque esta última acaba de ser declarada no apta para el baño por contaminación bacteriana.
En todos estos espacios naturales existen exhaustivos controles para garantizar la seguridad del baño a lo largo de la temporada, que terminará el 15 de septiembre. Se llevan a cabo tomas de muestras semanales de agua e inspecciones visuales, y los resultados son publicados en el mapa de actitud de las zonas con aguas autorizadas. La Dirección General de Salud Pública de la Consejería de Sanidad cuenta con una red de inspectores farmacéuticos que supervisan la salubridad y el Portal de Salud de la página web de la Junta de Castilla y León www.salud.jcyl.es actualiza los resultados cada semana, para que los bañistas dispongan de los datos más actualizados posibles.
Cimanes del Tejar
Al tratarse de una piscina natural, carece de cloro y sus aguas están siempre limpias y listas para el disfrute. La zona que rodea la cubeta está cubierta de césped, por lo que es perfecto para tumbarse un rato después de un refrescante chapuzón, también cuenta con unas amplias zonas de recreo y un área de merendero. Además, el lugar dispone de comodidades como zona de vestuarios, duchas y servicios.
Llamas de la Ribera
Al igual que la anteriormente mencionada playa fluvial de Cimanes del Tejar, Llamas de la Ribera cuenta también con dos zonas destinadas al baño. Se ubica en el paraje de ‘Los Redondales’ y es punto de interés turístico para viajeros de toda la provincia. Además de la piscina fluvial, cuenta con una extensa zona de césped, parques infantiles, campo de fútbol, pista polideportiva, minigolf y, como no, un buen merendero para reponer fuerzas.
Igüeña
El río Boeza a su paso por el municipio de Igüeña es otro de los lugares clasificados como zona apta para darse un baño en la provincia. La playa fluvial, construida en 2009, sorprende por sus aguas cristalinas y además de darse un chapuzón, permite disfrutar de una comida en su restaurante.
Cacabelos
El pueblo de Cacabelos goza de una de las mejores playas fluviales de la comarca, con una amplia zona de césped y un trampolín para los más pequeños. A su vez, su frondosa vegetación proyecta amplias sombras para los días más calurosos. Sin embargo, los análisis de Salud Pública realizados esta misma semana han detectado unos parámetros elevados de contaminación bacteriana, por lo que desde la Consejería aconsejan evitar el baño esta temporada.
Vega de Espinareda
Situada en el cauce del Río Cúa y cercada por un puente romano por un lado y una pasarela por el otro, se encuentra esta playa fluvial que cuenta ya con más de 70 años de historia y dispone de dos zonas para el baño. Una de las playas fluviales más grandes de la comarca del Bierzo que dispone de una gran zona verde y un bonito paisaje que acompaña y hace de esta playa fluvial una de las más concurridas de la provincia y un reclamo turístico más en esta localidad de Vega de Espinareda.
Lago de Carucedo
También en la comarca de El Bierzo, en su parte más occidental, se encuentra esta playa fluvial, ubicada en el lago de Carucedo, cuya historia está muy unida a la de Las Médulas. Se trata de un espacio natural protegido como reserva ornitológica, con patos en la superficie y, bajo ella, especies como la anguila o truchas.El lago está lleno de leyendas. Una de ellas relata que fue formado por la abundancia de lágrimas de la Ondina Carisssia, enamorada del general romano Tito Carissio, el conquistador de Lancia que dominó todo El Bierzo.
El ayuntamiento debe garantizar que puede atender la zona de baño, es decir, las debidas condiciones de limpieza, higiene y salubridad de las playas, así como controlar los posibles puntos de vertido que gestione la entidad local y se encuentren cerca de la misma. Además, deben instalar carteles en lugares visibles con información sobre la aptitud de la zona, la calidad de las aguas, si existe prohibición expresa o recomendación de no bañarse, y con las normas de educación sanitaria. También, han de prohibir el baño o recomendar abstenerse a instancia de la Agencia de Protección de la Salud.