Que muchos de los chavales durante las etapas de educación obligatorias se pasan el curso y un curso detrás de otro haciendo el bobo no es ninguna novedad desde hace ya mucho tiempo. Es precisamente lo que llevan años persiguiendo las distintas leyes y propuestas educativas y lo que consiguen por un lado el no tener unos planes de formación iguales para toda España, con unas exigencias mínimas a cumplir, y el que los hijos tengan unos padres totalmente haraganes por el otro.
Los alumnos pasan de curso aunque sean unos auténticos zoquetes porque si no se deprimen, pierden derechos o no sé qué ideas peregrinas más. Después llegan a etapas superiores con unas lagunas terribles y en las universidades el nivel es necesariamente cada vez más bajo por todo lo que viene de atrás, porque en lugar de apartar al que no vale como se hizo toda la vida ahora se pone a los listos al nivel de los tontos para que no se sientan en un estado de inferioridad.
Si es profesor o maestro ya no de la vieja academia porque de esos ya casi no quedan, pero sí de la algo menos vieja escuela entenderá perfectamente de qué le estoy hablando. Y seguramente usted pueda poner ejemplos por docenas de las burradas que ha leído en lo que se supone que es para evaluar conocimientos y que antes se llamaban exámenes pero ahora para algunos docentes son tonterías en las que se intercambian dibujitos, pegatinas y sellos de emoticonos.
Por eso no es de sorprender que el analfabetismo financiero que presentan muchos adultos sea exageradamente superior entre los chavales que están convencidos de que un crédito que se pide a un banco es un dinero que no hay que devolver, de la misma manera que piensan que el dinero de las tarjetas nace y se reproduce por arte de magia bajo el plástico y por eso tienen barra libre para gastar.
Ahí no hay problema, el verdadero mal está en que estos son los mismos que en la primera ocasión que se les presenta se meten en una lista para unas elecciones y terminan siendo concejales, alcaldes o de ahí para arriba si no hay quien les ponga freno vaya usted a saber hasta donde llegan pensando que el mundo funciona como ellos gestionan lo suyo.