El año 2024 se cierra con una cifra devastadora: 28 personas perdieron la vida en las carreteras de la provincia de León. Este balance negro nos recuerda la vulnerabilidad de nuestras vidas frente a los peligros de la movilidad diaria y la necesidad imperante de actuar para evitar que estas cifras sigan marcando nuestra vida. Las causas de estos accidentes son diversas: exceso de velocidad, distracciones al volante, consumo de alcohol y drogas, y las condiciones adversas de las vías en algunos tramos. Pero más allá de las cifras y las causas, cada fallecimiento es una tragedia que desgarra familias y deja una marca imborrable en la sociedad. Es urgente que las administraciones y los conductores asuman su parte de responsabilidad. Las infraestructuras necesitan mejoras significativas, especialmente en los puntos negros identificados en la provincia. Pero también se requiere un cambio de actitud en la conducción: más prudencia, respeto por las normas y conciencia sobre el impacto. No podemos permitir que la siniestralidad siga cobrándose vidas con esta frecuencia. León necesita campañas educativas más contundentes, controles de tráfico efectivo y un compromiso colectivo por la seguridad vial.
Año negro en las carreteras
Es urgente que las administraciones y los conductores asuman su parte de responsabilidad y, además, las infraestructuras necesitan mejoras significativas, especialmente en los puntos negros
03/01/2025
Actualizado a
03/01/2025
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