Una ayuda para pagar la vivienda

Las ayudas al alquiler que cada año pone en marcha la Junta de Castilla y León suponen un alivio necesario para muchas familias y muchas personas que presentan su solicitud buscando un complemento para hacer frente a este gasto sin que su cuenta y bolsillo se resientan en exceso. Después de tres llamamientos para subsanar errores, los expedientes se dan ya por cerrados y arranca ahora la fase de revisión para decidir cuántos de ellos pueden optar a esta subvención. Solo de León se han recibido cerca de 5.500 peticiones, lo que sitúa a la provincia como la segunda de la comunidad en número de demandantes de esta ayuda. El plazo de la convocatoria en principio expira el 15 de junio, sin embargo, la fecha de resolución no está clara todavía, aunque se espera que se conozca durante el verano. De los datos que maneja la Junta se extrae que quienes buscan esta subvención prefieren en su mayoría presentar su solicitud en persona. Además, en esta ocasión, la Junta no descarta ampliar el presupuesto destinado a esta iniciativa. Se contemplan inicialmente 19,72 millones, de los que 630.045 se reservan para las solicitudes de personas arrendatarias en situación de vulnerabilidad sobrevenida, pero se abre la opción de ampliar en 14 millones más en función de las necesidades. Todo ello con el fin de facilitar el acceso a viviendas en régimen de alquiler o cesión de uso a sectores de la población con recursos económicos limitados.