Buenas noticias a cuentagotas

Dice el refrán que obras son amores y no buenas razones. En una provincia donde los proyectos se tramitan a una velocidad insultantemente lenta, sólo nos queda celebrar cuando llegan al fin algunos avances, como es la próxima licitación de las obras para soterrar la ronda este de la capital leonesa a su paso por el cruce de La Granja. Porque los proyectos llegan a cuentagotas, cuando no recortados, como hemos visto en el soterramiento del AVE o la rehabilitación del Parador de San Marcos. León se ha tenido que conformar en la última década y media con ir avanzando  a trancar y barrancas en los proyectos que se diseñaron durante la etapa de Zapatero, con el Incibe como gran referente y Torneros como una quimera que cada vez parece estar más lejos mientras en Valladolid se han impulsado estos años infraestructuras sospechosamente semejantes: nuevos talleres ferroviarios, plataforma logística, la U de Olmedo para canalizar el tráfico desde Galicia hacia el norte y el este por Valladolid en detrimento del Manzanal (que sigue en estudio de viabilidad)... Obras son amores, pero no parece que a León le quieran mucho en Madrid.