Los retos de Medicina

En los últimos años, la proliferación de facultades de medicina en diversos países ha sido una respuesta a la evidente crisis de recursos humanos en salud. La falta de médicos en áreas rurales y especialidades críticas ha puesto de manifiesto la urgencia de formar más profesionales. Nos sobran ejemplos en esta provincia. Sin embargo, este incremento exponencial en las escuelas de medicina podría estar generando un problema futuro aún más complejo: el más que posible exceso de médicos en el futuro no muy lejano. Actualmente, la apertura de nuevas facultades a menudo carece de una planificación estratégica que garantice la calidad educativa y la adecuada distribución de los egresados, por lo que la Universidad de León tendrá que pelear por hacerse un hueco para completar su matrícula con muchas de las privadas y también con algunas públicas. Muchas instituciones no cuentan con infraestructura adecuada ni suficientes plazas para internado y residencia, esenciales para una formación completa. Esto podría resultar en profesionales mal preparados para enfrentar los desafíos del sistema de salud. Por otro lado, el mercado laboral podría saturarse en una o dos décadas, especialmente en zonas urbanas donde ya existe alta densidad de médicos. En lugar de resolver la crisis actual, se corre el riesgo de trasladar el problema a otro escenario: médicos desempleados o con migraciones masivas hacia otros países. El reto está, como siempre, en encontrar un equilibrio.