Hace ahora quince años –se cumplirán el próximo lunes–, el 20 de noviembre de 2008, se constituía formalmente la ‘Fundación Cerezales Antonino y Cinia’, impulsada por el conocido empresario Antonino Fernández –emigrado a México, y fallecido en 2016, llegó a ser director general y presidente del consejo de administración del cervecero Grupo Modelo–, que lleva su nombre y el de su esposa –Cinia González–; y también el de su pueblo natal, Cerezales del Condado –perteneciente al Ayuntamiento de Vegas del Condado–, que se encuentra a unos treinta kilómetros al noreste de la capital leonesa. De esta forma, facilitaba el acceso a la cultura en su tierra de origen.
Allí, en las antiguas escuelas de la localidad, tiene su sede, si bien desde el año 2017 cuenta justo al lado, además, con unas instalaciones –diseñadas por el estudio de arquitectura AZPML– amplias, modernas y polivalentes –hasta cuentan con un establo, con bueyes y un burro–; y que, al mismo tiempo, no desentonan lo más mínimo con el entorno, lo que –por cierto– es de agradecer. Tuve ocasión de visitarlas, acompañado por la coordinadora general de la fundación, Zaida Llamas –todo un lujo, dicho sea de paso–, hace ya algún tiempo.
La ‘Fundación Cerezales Antonino y Cinia’ busca principalmente el desarrollo del territorio y la transferencia de conocimiento a la sociedad, para lo que se centra básicamente en la producción cultural y en la etnoeducación. El arte se erige en su eje fundamental, entrelazado a su vez con la sociología, la economía, el medio ambiente…; y todo ello cristaliza en una amplísima programación de todo tipo –conciertos, exposiciones, talleres, seminarios…– que se ha convertido, por derecho propio, en un auténtico referente en nuestra tierra. Como puedes imaginar, su actividad hace a su vez que Cerezales tenga una ‘vida’ muy intensa… Supongo que estés al tanto de su agenda; pero, si no es así, échale un vistazo a su página web… y vete tomando nota, que la oferta, desde luego, es muy seductora…