Juan Morano, alcalde

Juan Morano fue alcalde de León, sí, pero no uno más. Estuvo al frente de la ciudad desde 1979 hasta 1987, y desde 1989 hasta 1995, años estos de grandes cambios en la capital: se construyen parques y jardines, se adecúa el Bernesga, comienza la urbanización de Eras y de La Chantría… Y fomenta la Semana Santa, dicho sea de paso.

A Morano le pasó de todo: hubiera sido en 1979 el primer alcalde de la capital elegido en las urnas tras el Franquismo pero, durante unos meses –hasta que se resolvió una irregularidad en el proceso electoral–, fue Gregorio Pérez de Lera el máximo mandatario municipal; el llamado Pacto Cívico –una alianza de PSOE, AP y CDS– impidió a Morano gobernar entre 1987 y 1989; protagonizó una huelga de hambre con los trabajadores del matadero al anunciar la Junta su cierre…

Formó parte de diversas formaciones –UCD, AP, PP– y se dedicó, en su última etapa, a la política estatal, en el Congreso y en el Senado. Pero, sobre todo, ya sabes que Morano se volcó en lo municipal, en ese León por el que siempre luchó liderando su Agrupación de Electores Independientes. A su manera –eso sí–, porque no siempre compartía las directrices de los partidos… aun cuando formaba parte de ellos. De hecho, no sé si sabes que abandonó el PP en 2012 por discrepancias en el asunto de la minería.

Pero estarás conmigo en que, si por algo ha de ser recordado Morano, es, sin duda, por su manifiesta oposición a la comunidad autónoma de Castilla y León, cuyo estatuto se promulgaba en 1983. 90.000 personas –según la policía local– pidieron a gritos la autonomía para León tras la icónica pancarta de ‘León solo’ en la multitudinaria manifestación convocada por la Plataforma Leonesista en 1984 y que él mismo encabezó.

Fue el 4 de mayo. Y en el día en que se cumplían 34 años de aquel hito histórico del leonesismo, se anunciaba por error –la noticia salió de su entorno familiar– la muerte de Morano. Hubiera sido una fecha muy simbólica…

Falleció al día siguiente. Descanse en paz.