El domingo Ana Sánchez, esa socialista que no valdría para trabajar de cara al público pero, en cambio, era portavoz de su partido en Las Cortes (la misma que criticaba a Vox pero no tardó nada en ponerse de acuerdo con Pollán para subirse el sueldo) estuvo en Sahagún, en lo que los socialistas llaman la ‘fiesta de la rosa’... aunque más bien parecía la fiesta de los puñales. Hoy la que viene a León es Virginia Barcones. Curioso que ninguna de las dos, ni tampoco Tudanca (¿se acuerdan de él?) estuvieran en la toma de posesión de Courel en Diputación. No se descarta que apliquen el «para lo que me queda en el convento...».
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