Los pájaros vuelan en madreñas

El pueblo se hace grande cuando los pájaros vuelan en madreñas, entornando la vista desde la cima de la torre de la Iglesia, viendo ondear los pendones de los pueblos hermanados, al son de la gaita de Fran Alegre, para que no se nos olvide que la montaña existe. Ya vuelan los pájaros entre República y pueblo libre, con ánimo de no perder la identidad de lo nuestro, quizás faltaron Los Titos del Torío que tanto le gustan a Epigmenio Rodríguez o el Canto del Fugao de Arbás, el huido y escondido bajo la nieve aupado con un par de madreñas, gritando frío y esperanza; pero era demasiado repertorio para Tarna, que supo muy bien conjugar el folclore de nuestros antepasados con toques contemporáneos, reivindicando nuestra cultura para que perdure en el tiempo.

Vuela el pájaro grande quemando querosenohacia Bruselas, aterrizando con las madreñas para pisar la moqueta de las instituciones europeas,con el deseo de regresar al campamento de Vestas, con la buena noticia de que el empleo no desaparezca.Victoria que necesitamos como punto de partida para continuar el camino, siguiendo la vía estrecha bien forjada, para quelos pueblos de la montaña no asistan al desmantelamiento de Feve, al igual que su industria, los servicios públicos y todas las infraestructuras que tanto necesitamos para recuperar el pulso económico de nuestra Región.

Sean las madreñas nuestro símbolo, baltemos el árbol y empecemos a furar la madera para darle formaal tronco, para que el furaco sea de la medida del pie y de todos los pies del pueblo dormido, sea la ijada quien nos guie y nos despierte, para gritar alto y claro que no queremos que nuestro pueblo quede en el olvido, que no nos arrase los que nos mal gobiernan, que no nos inunden como tantos valles, QUE YA ESTA BIEN. Despertemos pueblo de León que nos toca luchar duro y fuerte, antes de que seamos demasiado viejos, para que no nos pille el fin del mundo como muy bien auguró Victor. M. Diez en su Opera Equinoccio.