Leí ‘Salmones, hormonas y pantallas’ del doctor Miguel Angel Martínez González y me encantó. Considerado uno de los mayores expertos en dieta mediterránea, es catedrático del Departamento de Medicina Preventiva de la Universidad de Navarra, profesor de Salud Pública, Metodología de Investigación y Gestión Clínica en la Facultad de Medicina de la misma Universidad. Me resultó interesante por su enfoque divulgativo y a la vez porque proporciona argumentos científicos sólidos. Pude escucharle en León en una conferencia organizada por Argumenta y el Colegio Internacional Peñacorada.
El libro se centra en las adicciones y la sexualidad. Y como dijo la presentadora Sara Durántez, está escrito en «un tono positivo, esperanzador y que aporta muchos datos para reflexionar tanto a adultos como a jóvenes».
El ponente nos habló de la valentía de muchos jóvenes que son capaces de nadar contracorriente «en un ambiente donde se incentiva la gratificación inmediata, instantánea e irresponsable y que no quieren ser uno más del rebaño: son salmones que viven a contracorriente de unos dogmas comerciales que dañan mucho a las personas».
Hay una crisis en la gente joven. Y tiene que ver «con problemas de salud mental, con las adicciones a las pantallas y con la revolución sexual global de mayo del 68». Basándose en diferentes estudios, habló del aumento de suicidios (entre los 15 y los 29 años, la principal causa de muerte en España, con alguna excepción), de cómo el 60 % de los estudiantes universitarios en EE UU tenían problemas de salud mental, de cómo el 8 % de la población española consume ansiolíticos o cómo España y Portugal son los países que más ansiolíticos y antidepresivos consumen. También, de cómo el uso de los móviles potencia por 3,1 la depresión, por 3,05 la ansiedad y por 2,6 los trastornos del sueño.
Nadar contracorriente cuesta, pero desde el punto de vista de la salud es lo más beneficioso. Lean el libro. Me lo agradecerán.