¿Quién es el que necesita educación?

Javier Campos
08/07/2024
 Actualizado a 08/07/2024

Durante las últimas décadas entre todos los españoles hemos sido capaces de construir una sociedad que avanza en derechos, en coberturas, en políticas sociales y sobre todo en calidad de vida. Los logros mencionados nunca hubieran sido alcanzados sin hacer una apuesta firme por la educación mediante las distintas leyes educativas impulsadas desde los distintos Gobiernos de España.

En referencia a la última ley educativa, la LOMLOE, cabe destacar que consagra, entre otras garantías, la de una educación INCLUSIVA, procurando atención personalizada y la observación de las dificultades en el aprendizaje además de actuar sobre ellas tan pronto sean detectadas. Estas garantías permiten que muchos padres y madres tengan la oportunidad de escolarizar a sus hijos, con todas las necesidades que tengan, en centros educativos NO especiales. Este es el caso de Fidel, alumno del CEIP ‘Peñalba’ de Ponferrada, escolarizado en una enseñanza absolutamente reglada y con una integración absolutamente normal, eso sí, atendiendo a sus especificidades.

En el caso de Fidel, tanto la administración autonómica, con sus limitaciones, así como equipo directivo, profesorado, compañeros y comunidad educativa en general hacen un trabajo excepcional para cumplir con lo que la ley consagra, el principio de INCLUSIÓN.  Fidel es un niño querido y feliz en su escuela, es un ejemplo de esos pequeños ‘milagros’ que con mucho esfuerzo enorgullecen a toda una comunidad educativa y dan sentido a las leyes y normas que entre todos nos otorgamos.

Probablemente todo lo indicado hasta ahora nada signifique para el indolente alcalde del municipio de Molinaseca, de donde son vecinos Fidel y su familia. En estos últimos días hemos tenido que asistir incrédulos y entristecidos a sus maniobras para impedir que Fidel disfrute con sus vecinos y amigos del pueblo del campamento de su municipio al haberle sido denegada la participación. Ironías del destino, el denodado esfuerzo de legislar y de toda una comunidad educativa durante 10 meses, el Sr. alcalde lo denuesta y desprecia sin miramientos, recordando así viejos comportamientos y actitudes de tiempos pasados, y de paso, evidenciando las claras dificultades extra por las que pasan estas personas fuera del ámbito escolar.

Sea como fuere, desde el PSOE de León queremos poner en valor nuestras políticas educativas que tienen que ser apoyadas y complementadas por el ámbito externo a la escuela con actitudes totalmente opuestas a la injusticia, indolencia e inmoralidad reprobable practicada por el alcalde de Molinaseca. La cobardía con la que se ha manejado el edil queda reflejada en la falta de explicaciones claras y en la falta de voluntad para solucionar el problema y es evidente que casos como el de Fidel nuestra sociedad no los puede permitir.
 

 

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