Rodríguez: "Debemos apostar por una provincia verde, sostenible, innovadora, saludable y comunicada"

Entrevista a la coordinadora general de la Mesa por León

David Rubio / Alfonso Martínez
09/10/2020
 Actualizado a 09/10/2020
La coordinadora de la Mesa por León, Humildad Rodríguez, durante su visita a La Nueva Crónica. | MAURICIO PEÑA
La coordinadora de la Mesa por León, Humildad Rodríguez, durante su visita a La Nueva Crónica. | MAURICIO PEÑA
Después de años apartada de la vida pública, Humildad Rodríguez se ha convertido en la persona sobre la que girará el funcionamiento de la Mesa por León con el objetivo de poner fin al declive económico y demográfico que padece la provincia. Profesora de la Universidad de León, fue anteriormente directora de la Fgulem y concejala en la capital, aunque ahora su tarea se centrará en tratar de unir el trabajo de administraciones y agentes sociales en pro de un futuro para esta tierra.

- ¿Cómo le convencieron para aceptar un rato tan importante y regresar a la primera línea después de años apartada de la vida pública?
- Porque creo que soy una persona que he sido comprometida en la vida. Comprometida con mi familia, con mis alumnos… Y creo que este es un momento en el que la gente lo está pasando muy mal. La situación de León todos los la conocemos y creo que es un momento en el que hay que arremangarse y echar una mano en la medida de lo posible.

- ¿Cuáles son los principales problemas que han llevado a la situación actual de la provincia y sacaron a la calle a miles de leoneses en febrero?
- Son problemas múltiples y de mucho tiempo. No se han ido abordando desde muchos puntos de vista. Se habla generalmente de lo que la clase política ha hecho o no. Pero aquí hay clase política, hay empresarios, hay ciudadanía… La cuestión es si todos hemos hecho lo que hemos podido. Porque al final la clase política es la que votamos, la que elegimos los ciudadanos. En Estados Unidos también la eligen. Cada uno tiene lo que elige. Todos en mayor o menor medida somos responsables de haber llegado a esta situación, en la que no se han dado las condiciones adecuadas para que la gente se pueda quedar a vivir. Es así, pero yo creo que todos tenemos talentos, mayores o menores, pero todos pueden ser muy valiosos. Es momento de que hagamos algo más que comentar gratuitamente lo mal que está todo y de pensar qué podemos hacer o qué hemos hecho. No de boca. Esa es la razón fundamental, pero hay también muchos incumplimientos, muchas dejaciones, convocatorias a las que no se ha acudido o en las que ha habido que devolver fondos porque no había proyectos o no se sabían gestionar. Vamos a ver si somos capaces de aportar soluciones.

- El Gobierno ha anunciado esta semana un plan para transformar la economía española en los próximos años y que se apoya en la transformación digital y la transición justa. ¿Son también los dos pilares sobre los que se tiene que apoyar el futuro de la economía leonesa?
- Debemos apostar por una provincia verde, sostenible, innovadora, saludable y comunicada. Creo que son los pilares del futuro. Tenemos que ser conscientes de donde estamos. Somos una ciudad y una provincia pequeñas que viven en un mundo global. Tenemos que saber por dónde va a ir el mundo y dónde nos tenemos que situar. Debemos entender también que esta pandemia nos va a dejar un cambio brutal en el modo de vivir y que hay cosas que se han hecho en el pasado que no se van a poder volver a hacer de la misma manera. Habrá muchas cosas que se han hecho como se ha podido, pero ahora estamos en otro momento. Esas formas no han dado buenos resultados y no se puede seguir por ahí. Es como cuando uno va por una calle y se cae en una zanja. Lo normal es que cambie de acera e ir por otro lado, porque si no lo haces, no te puedes quejar de que te caigas otra vez a la zanja. Eso va a afectar un poco a todo. Nos van a entrar unos fondos de la PAC en 2021. Antes había que cumplir unos requisitos para acceder a las ayudas, pero ahora se van a medir los objetivos que se consigan. Ya no es solo que alguien tenga una tierra de tres hectáreas y solo por eso reciba las ayudas. El comercio minorista también va a tener que cambiar. Las compras han cambiado totalmente como consecuencia de la pandemia y eso se va a quedar. Esta digitalización viene derivada de los fondos europeos y es ineludible. Habrá que formar a la gente para que sepan cómo hay que ir haciendo las cosas y contar con una estructura para ayudar cuando un proyecto llegue a un municipio pequeño. Hay que intentar que optimizar los recursos y trabajar en red entre las diferentes administraciones. En los proyectos energéticos voy a trabajar con Ciuden, porque tiene técnicos especializados para analizar los proyectos que puedan ser viables, como es el caso de la apuesta por el hidrógeno verde que ha hecho el Gobierno. Va a haber proyectos experimentales y las zonas en las que ha habido minería van a ser especialmente sensibles a la hora de optar a albergarlos. También está el Icamcyl, que trabaja en nuevos materiales… Es importante hacer cosas de manera coordinada y sin duplicar trámites.

- Ese trabajo en red es como la vida comunal que había en los pueblos y que se ha ido perdiendo…
- Pero qué importante era esa vida comunal y cuánto se transmitió en ella. Cuánto aprendimos de esas vidas comunales y del anochecer en las peñas de los pueblos. No se debería perder, lo cual no evita que podamos dar pasos en otras direcciones al mismo tiempo. Yo puedo estar conectado, pero al mismo tiempo querer leer un libro. 

- ¿Pasa el éxito de la Mesa por León por que las instituciones aporten fondos adicionales a los ya previstos o por que se empleen de otra manera?
- Por ambas cosas. Más fondos y más implicación. Eso solo sale delante cuando hay voluntad, trabajo y ganas de que las cosas salgan. Yo solo soy responsable de trabajar todo lo que pueda e intentar organizar los proyectos después de trasladar a las administraciones lo que recibamos de la sociedad y lo que creemos que hace falta ir impulsando en cada momento en función de las prioridades, pero ya lo que hagan entes ajenos... Cada uno tiene sus responsabilidades en la vida.

- Una vez asumido el reto, ¿por qué no pasaría? ¿Qué es lo que nunca consentiría dentro de la Mesa por León?
Que yo tuviera la sensación de que no está sirviendo para alcanzar el objetivo para el que se ha creado, que es sacar a León de la tristeza que produce ver su situación actual. Sé que esto es un proceso que a lo mejor no veré en su fase de culminación. Me está tocando iniciarlo y otros lo van a continuar. Es un proceso largo. Cuando a veces hablan de las Tierras Altas de Escocia hay que tener en cuenta que empezaron a trabajar en los años 60. Quizá la gente cree que esto va a ser inmediato y denunciará que se han incumplido los objetivos, pero las cosas en sus comienzos tienen detrás un trabajo de fontanería intenso. A lo mejor me toca hacer ese trabajo y es necesario tener una metodología rigurosa, unos objetivos y un plan de acción. Hay que crear una mesa, una agencia, una oficina técnica, unos expertos, unos foros de debate, unas sugerencias que me llegan, que analizo, que redacto, que someto a la mesa… Y analizar las convocatorias y ver qué proyectos encajan en cada una de ellas en función de los recursos endógenos de cada zona. Ahora, la gente de esos territorios tiene que decidir si quiere salir de ahí, porque a lo mejor se quiere solo de boca.

- ¿Quiere decir que quizá los pueblos sean reacios a los cambios?
- No digo que eso sea así. Pongamos el caso de la industria agroalimentaria. No solamente hay que cultivar, sino que hay que ser capaces de asociarse varios productores para montar una cadena en la que no solo excavemos la tierra, sino que generemos un valor añadido. Las zonas rurales están así porque no tiene un medio de vida agradable. Porque uno se queda en el pueblo cuando está bien comunicado, cuando tiene sanidad, cuando sus hijos tienen escuela y cuando tienes un medio para vivir. En general, la gente no emigra por ganas. Y si quiere hacerlo, me parece fenomenal, pero muchas veces la gente se ve obligada a marcharse para buscarse su vida o la de sus hijos. Lo primero que hay que hacer para frenar la despoblación es darle a la gente condiciones de vida adecuadas. Hay que cambiar una serie de cadenas logísticas, de puesta en el mercado, de saber vender las cosas de otra manera… En estas cosas tenemos una cultura que no está al día.

- Dicen todos nuestros políticos que León no tiene tiempo. ¿No necesita la provincia un plan de choque inmediato más allá de los proyectos a largo plazo que se impulsen en la mesa?
- Estoy de acuerdo, pero es que nadie lo ha pedido en 20 años. Y lo que no hay son milagros. Esto no funciona con una varita mágica. Uno tiene una parcela de mil metros cuadrados y quiere que le dé mil euros, pero tiene que arar la tierra, sembrarla, quitar las malas hierbas, echar abonos, recoger el producto y venderlo. Y eso es un ciclo. Que un proyecto aparezca en un presupuesto no significa que al día siguiente esté hecho y funcionando. Lo otro es hablar. Una cosa es hablar y otra es tener. Hay que ser realistas. La gente dice sí a todo, pero necesitamos saber dónde estamos.

- ¿Y qué papel tiene que jugar la iniciativa privada? ¿Deben ser solo reivindicativos o también tienen que hacer propuestas?
- Tienen un papel muy importante. Conozco empresarios en León de una valía extraordinaria. A lo mejor públicamente son poco conocidos, pero los hay muy buenos. Cada uno tenemos nuestras responsabilidades y debemos asumirlas.

- ¿Es posible que regresen empresarios leoneses que invirtieron fuera de la provincia?
- Tenemos que ofrecerles condiciones suficientemente buenas como para que vean que les conviene invertir aquí. Y en un momento dado León debería ser considerada como una zona prioritaria a la hora de valorar una reducción de impuestos por un periodo de tiempo limitado. Es un tema de muchos actores. Yo empiezo en este momento, de lo de atrás no quiero opinar, porque a mí me compete trabajar.

- ¿Tiene miedo de que los objetivos de la Mesa por León choquen con la extremada lentitud con la que funcionan las administraciones?
- Sé cómo funcionan las administraciones. En el proyecto de recuperación que ha presentado el Gobierno se hablaba de una modificación de la tramitación administrativa que a mí me parece imprescindible. Ya es bastante complicado para un empresario que haya normativas distintas entre las comunidades autónomas y poder saber lo que hay que cumplir en cada sitio, así que si le sumamos los trámites, los plazos y demás… Es importante ese cambio en la burocracia para poder aprovechar esos fondos de recuperación en tres años y que no nos perdamos por el camino. Hay veces que se pasa una convocatoria de subvenciones sin que se haya podido contratar a un técnico que necesitas para elaborar el proyecto. Yo siempre he sido partidaria de que se exijan responsabilidades por lo que se hace, pero también te tienen que dejar un poco de libertad para decidir y ser más ágil. Pero aquí en general la burocracia en lenta y las responsabilidades que se piden no suelen ser muchas.

- El alcalde de León decía recientemente que la Mesa por León debería empezar por la culminación de los proyectos pendientes. ¿Va a ser ese uno de los primeros objetivos?
- El borrador del plan estratégico pasa por la incardinación entre todas las administraciones y con otras entidades. Esto no puede ser la feria de las vanidades. Como más a gusto trabajo es en la parte de atrás, con voluntad de coordinación y unidad de acción, pero luego cada uno que salga y diga lo que quiera. El documento marca la priorización de los proyectos comprometidos y no ejecutados y analiza su situación actual. En la reunión empecé por comentar aquellos que tendrían que recoger partidas presupuestarias el año que viene a nivel estatal y autonómico, porque si no aparecen en boletín, no existen. La minería y la transición energética fue un poco el despertar de este movimiento en León, pero también son fundamentales las comunicaciones y las infraestructuras, además de la agricultura, la ganadería y los regadíos. Pero en el borrador también figuran ejes como la ciberseguridad, la biotecnología, la innovación, la industria, el comercio los servicios, el turismo, el patrimonio y la cultura. No creo que haya provincias con la valiosa cantera de escritores que tiene León.

- Una de las bases del éxito de ese borrador es la unidad. ¿Será capaz de hacer entender a los representantes políticos que la unidad de la que tanto hablan es algo más que no ponerse la zancadilla?
- Cuando el alumno está preparado, aparece el maestro. Si están dispuestos a unirse, lo haremos, pero si no están preparados… Te lo han dicho cien veces, no lo has entendido… Cuando estás preparado, entiendes lo que te están diciendo. Eso no depende de mí. Yo tengo una parte, que es la mía, la de coordinar la mesa. Yo puedo decírselo, pero no puedo obligar a nadie a llevarse bien con otro.
Lo más leído