En un mundo de hombres

La Cofradía de las Damas de la Virgen de la Piedad nació hace 25 años por la abnegación de un grupo de jóvenes mujeres que no se conformaban con ver las procesiones desde la barrera. Querían formar parte activamente de la Semana Santa astorgana, pues la vivían con la misma pasión que los hombres, que por aquel entonceseran los únicos a los que se les tenía permitido portar los pasos. Es por eso que estas mujeres decidieron tomar las riendas y formar así la primera cofradía femenina, la de las Damas de la Virgen de la Piedad, una hermandad que si bien es la más joven de la ciudad, cuenta actualmente con 240 mujeres que participan no solo en actos enmarcados dentro de esta festividad, sino durante todo el año, conciliando, algo que difícilmente son capaces de lograr, esta pasión con su vida laboral y familiar.

Las Damas de la Virgen de la Piedad de Astorga se abriópaso hace 25 años como la primera hermandad femeninaPero los inicios nunca son fáciles, y tampoco lo fue para las más de un centenar de féminas que se embarcaron en este proyecto en 1993. En un principio no contó con la confianza de la población, e incluso tuvieron que escuchar algunos comentarios poco alentadores. Pero 25 años después siguen contribuyendo a que la Pasión astorgana sea lo que es hoy en día, un reclamo turístico no solo a nivel provincial, sino nacional.

La Cofradía de las Damas procesiona con dos pasos: el Cristo Crucificado, con el que desfilan en un vía crucis procesional por las calles de la ciudad el Viernes de Dolores, y La Piedad –cuyo manto lució nuevos bordados con motivo del aniversario–, que protagoniza la procesión del Lunes Santo. También participa en la procesión del martes, organizada por la Junta Profomento, con el resto de las hermandades de la localidad maragata. El paso titular, La Piedad, originario de Valdeviejas, descansa en el Museo de los Caminos, mientras que el Cristo Crucificado –talla que ha ido cambiando en los últimos años para facilitar su traslado a las braceras– permanece durante todo el año en el santuario de de Nuestra Señora de Fátima, sede canónica de esta hermandad. Y es que, a día de hoy, 25 años después de su nacimiento, todavía sigue esperando su cabildo, siendo la única hermandad de la ciudad que no lo tiene, relata su abadesa, Ylenia Gutiérrez, que confía en que las "buenas palabras" que reciben en lo referente a este asunto se conviertan pronto en hechos.

Las Damas visten de negro, con fajín blanco, y su emblema es un corazón envuelto en unsudario, con una palma y una hoja de roble, símbolo de la ciudad de Astorga. Una de sus principales tradiciones es la de llevar huevos a las monjas de Santa Clara, con las que están hermanadas –junto con la Cofradía de La Agonía de Nuestro Señor de León–, para evitar las lluvias durante las procesiones, y parece que funciona, porque desde que se inició esta costumbre han podido salir todos los años.

Estas mujeres consiguieron abrirse paso en un mundo de hombres, y no solo eso, gracias a su iniciativa se empezó a permitir la puja de los pasos a mujeres en otras cofradías. Además, cada año se va renovando con nuevas y jóvenes cofrades que recogerán el testigo de estas pioneras, llevando a cuestas su legado durante, por lo menos y como mínimootros 25 años de Pasión astorgana.