"Es más difícil encontrar a una borriquilla que a un Jesucristo"

«Llevo desde 1997 haciendo el papel de Jesucristo en la procesión de la Borriquilla y después el Viernes Santo. Lo dejó el anterior y como tenía una barba aparente y el pelo un poco largo me lo propusieron y acepté, aquí en Santa Lucía es muy importante la Semana Santa, me gusta participar y colaborar».

- Por lo que veo lo de tener Jesucristo ‘viviente’ lo tienen solucionado.
- La verdad es que para la procesión de la Borriquilla nos resulta más complicado encontrar la borriquilla que el Jesucristo. Un año la trajeron de un pueblo ya cerca de León, otro de Ciñera, la de este año creo es de La Vid... quedan muy pocos, no es fácil.
- ¿Qué tal la procesión?
- Bueno, bien. Primero nos dejó el tiempo y después hubo un momento en el que se puso un poco revoltoso, pero se tranquilizó y ya no hubo mayores problemas, bueno no hubo ninguno.

Quien explica la curiosa situación de la dificultad para encontrar ‘borriquila’ es Félix Hernández Gago, ‘el Cristo’ de la Semana Santa de Santa Lucía de Gordón, quien este domingo salió nuevamente a lomos de la borriquilla en una de las citas más especiales y tradicionales de la esta localidad, una de las pocas que mantiene la salida del Domingo de Ramos procesionando la borriquilla ‘viva’, una de las pocas de la provincia que lo hace o, tal vez, la única. Héctor Luis Suárez Pérez, gran estudioso de este tema, señalaba que «no recuerdo ningún otro pueblo que la mantenga».

Contribuye así a ‘lucir’ una de las semanas santas más singulares e importantes de la provincia, gracias al gran trabajo de la Cofradía de El Encuentro de la Pasión, con más de treinta años de andadura en la antigua localidad minera. Una cita muy especial la de este domingo pues tenían «muchas ganas» en la Cofradía del reencuentro, que ya comenzó unas horas antes con un emotivo pregón de Montserrat Arias Aguirrezabala, que agradeció el impulso a esta cita de todas las personas que de alguna manera colaboran. Fue Santa Lucía una localidad minera. Y precisamente en la mina trabajó ‘el Cristo’ que entró en el pueblo a lomos de la borriquilla, Félix Hernández Gago, que fue durante años «maquinista de extracción en la Hullera Vasco Leonesa, hasta mi prejubilación cuando todo esto de la minería se fue al garete».

Recuerda Félix cómo se produjo ‘el fichaje’ del entonces minero para ser, a su vez, el Cristo de la borriquilla y, de paso, hacer doblete en la procesión del Viernes Santo. «Creo que era el año 1997, no estoy muy seguro, y el que lo hacía entonces lo quería dejar. Como yo tenía una barba aparente y el pelo un poco largo me lo propusieron... y acepté y aquí sigo».

- ¿Le cogiste gusto?
- A ver, la Semana Santa es muy especial en Santa Lucía, se vive de una manera intensa, la gente la cuida, creo que están orgullosos de ella y me gusta poder colaborar de alguna manera.
- ¿Eres muy religioso?
- Se podría decir que no soy muy de iglesia, pero creo que no es importante ese aspecto. Desde que estoy en la Cofradía lo veo de otra manera.

Le resta aún a Félix la salida del viernes pujando la Cruz. Y a la Semana Santa citas muy especiales, como la Procesión del Silencio (el miércoles) y la de las Antorchas (el jueves). El viernes es la otra cita ‘grande’ con la procesión que le da nombre a la Cofradía —El Encuentro— para cerrar el domingo por la mañana una nueva edición, la más esperada de los últimos, por lo que le piden al cielo que el buen tiempo les acompañe.
Félix, con los años que lleva de Cristo algo de mano tendrá.