La lluvia obliga a suspender las tres procesiones de este Lunes Santo

L as previsiones meteorológicas apuntaban a una tarde lluviosa de Lunes Santo en León. No fallaron los pronósticos y a las ocho de la tarde, a las puertas de Santa Nonia, León se quedó con las ganas. Los hermanos de las cofradías de Nuestra Señora de las Angustias y Soledad, la del Dulce Nombre de Jesús Nazareno y la Real Cofradía de Minervay Veracruz no pudieron salir con su procesión de la Pasión y dentro del templo quedó su Virgen de las Angustias, el Nazareno y la Virgen de la Piedad. La lluvia no dio tregua a las cofradías más veteranas de la Semana Santa leonesa a las que no les quedó otro remedio más que conformarse con un acto de recogimiento en su punto de encuentro. "Para el año que viene, si Dios quiere".

La siguiente parada de la tarde era la iglesia de San Marcelo, donde se congregaron los hermanos de la Hermandad de Santa Marta y la Sagrada Cena. La lluvia también empantanó sus planes y no pudieron salir a la calle para rezar el Rosario de Pasión, que rezaron en el interior de San Marcelo. Estaba previsto que en su itinerario portasen, como es habitual, tallas procedentes de toda la provincia, pero no pudo ser. "Para el año que viene, si Dios quiere".

Y a la tercera no fue la vencida. Las precipitaciones insistieron y siguieron cayendo con ganas en una ciudad cuyas calles fueron tomadas por los paraguas y no por las esperadas procesiones. La Cofradía del Santo Sepulcro Esperanza de la Vida no pudo celebrar la procesión de Adoración de las Llagas de Cristo que les lleva habitualmente a recorrer un trocito de Barrio Húmedo con el Santísimo Cristo Esperanza de Vida, con el sonido de la matraca devolviendo al casco histórico sus aires de antaño. "Para el año que viene, si Dios quiere".