Minutos antes de que dieran las seis de la tarde, decenas de personas ya se congregaban en los alrededores de la plaza de San Marcelo de León. También lo hacían en el entorno de la capilla de Santa Nonia y la carpa instalada por la Cofradía. Aunque por un momento el cielo tornara azul celeste, los primeros paraguas ya comenzaron a abrirse antes de que arrancaran las comitivas previstas para la tarde de este Viernes Santo. Una lluvia al principio muy débil podía dar un poco de esperanza. Pero no fue así. La Cofradía de las Siete Palabras de Jesús en la Cruz y la Cofradía de Nuestra Señora de las Angustias y Soledad se han visto obligadas a suspender sus procesiones.
La tormenta ha ido en aumento y ha sido pasadas las 18:15 horas de la tarde cuando se ha tomado la decisión. La Procesión del Santo Entierro y la Procesión de las Siete Palabras tendrán que esperar a la próxima Semana Santa. Cientos de papones y braceros ya estaban preparados para vivir con emoción los actos que pondrían fin a este Viernes Santo en León, pero no ha podido suceder. Los pasos que ya estaban instalados en la calle Legión VII de la capital tuvieron que ser devueltos a la carpa instalada en la plaza de San Marcelo mientras los cofrades acudían a la iglesia para concluir la jornada en su interior.
No es el primer acto que la Cofradía de las Siete Palabras se ve obligada a modificar durante esta Semana Santa. El pregón a caballo de este Jueves Santo tuvo que reducirse a la primera proclama que se hizo bajo una intensa lluvia en la plaza de San Marcelo.
Por su parte, la Cofradía de Nuestra Señora de las Angustias y Soledad, que organizaba este 2024 la Procesión del Santo Entierro al tratarse de un año par, ya había modificado su recorrido ante los avisos meteorológicos. Estaba previsto que desde la Catedral regresaran por la calle Ancha hasta Santa Nonia. Las lágrimas han sido protagonistas entre los cofrades, que deseaban salir con sus pasos este año.