Sobre impresoras e impresiones

Ya saben eso de que cuando un perro muerde a una persona no es noticia, lo que sí es noticiable es que un ser humano hinque el diente a un can. Pues esto es lo que ha ocurrido esta semana en el latifundio leonés. Estamos tan acostumbrados a las malas noticias y a la fuga de empresas y talento de nuestra provincia, que cuando sucede algo que en principio no debería ocupar portadas, sí lo hace. Me refiero a la confirmación, una vez más, del compromiso que HP tiene con León, al trasladar desde la India parte de la producción de impresoras de gran formato. Aunque quizás sea más certero hablar del compromiso de un leonés con su tierra. Porque detrás de la decisión de esta multinacional está nuestro paisano Miguel Ángel Turrado, director General de HP.

Los treinta puestos de empleo directo que generará esta apuesta por León, más todos los indirectos asociados a esta nueva actividad, son más que necesarios en unos momentos en los que vemos cómo el futuro de la provincia está dejando ya las tonalidades de grises para acercarse al triste y frío negro. Pero si les soy sincero, el número de puestos de trabajo es lo de menos. Para mí son más importantes las impresiones que genera esta noticia. La primera de ellas es que una vez más, el sector privado ha demostrado ser mucho más ágil y leal con León que el público. Otra es que las decisiones de leoneses de bien como el caso de Miguel Ángel Turrado, dejan en muy mal lugar a muchos de nuestros representantes políticos, que anteponen sus intereses personales y partidistas al compromiso con la tierra donde habitan aquellos que les han elegido para defender sus intereses. Pero quizás, la más importante es la simbología que está detrás de este anuncio y que nos da ciertas esperanzas sobre que la batalla no está perdida del todo. De las cenizas de una empresa referente a nivel nacional como era Everest, ahora resurge como Ave Fénix este proyecto de HP. Donde hace años máquinas de impresión escupían libros llenos de conocimiento e historias reales y fantásticas, ahora se dará vida al software de todas las impresoras de gran formato de la compañía a nivel mundial.

Aunque podamos pecar de pedigüeños, quizás tendríamos que preguntar a Miguel Ángel Turrado si en horas sueltas, algunos de los nuevos ingenieros contratados pueden desarrollar un software ‘made in León’ para implantar un chip a ciertos leoneses, de los que depende gran parte del futuro de la provincia, para que antepongan el interés general al propio y se crean de verdad que nuestro terruño es una tierra de oportunidades.