Cansado de la gran ciudad, el estrés y la contaminación, sintió, una vez jubilado, que Madrid ya no era para él y decidió cambiar el rumbo de su vida. Pedro Sienes Flores, un madrileño enamorado de los ríos de León y que lleva más 35 años pescando truchas a mosca.
En sus habituales salidas de pesca descubrió que la región leonesa es origen de grandes masas fluviales llenas de vida. Le cautivó el río Esla, ese que atraviesa la provincia de León y recoge el agua de ríos como el Órbigo, el Porma, el Tera, el Cea o el Bernesga y recorre 287 km. para desembocar en el Duero ya en la provincia de Zamora. Pedro, nos confiesa, que se vino a vivir a León atraído por sus extraordinarios ríos y sus truchas. Cuando le preguntamos porque eligió Boñar como residencia habitual, nos contesta que «por su paz y tranquilidad». Pero, sobre todo por la pesca y su naturaleza: «Elegí Boñar, porque lo tiene todo para enamorar a un pescador. Es una villa con más 1.800 habitantes, rodeada de grandes ríos trucheros, como el Porma, Curueño, Torio y Esla, en medio de paisajes, incuestionablemente, maravillosos y con un gran número de rutas homologadas con unas características y encanto inigualable.Al que le interese la pesca, el senderismo y el medioambiente esta en el Paraíso, de Boñar al cielo. Además, no olvidemos que en su término municipal se encuentra el embalse del Porma, otro enclave perfecto para la pesca y la relajación. Es un entorno privilegiado».
«La mejor repoblación es no matar sus truchas. Los cotos de Villafeliz, Vegamián y Boca deben ser sin muerte» Sólo un apasionado como Pedro Sienes podría contar tantos secretos del arte de la pesca a mosca. Lleva más de 35 años pescando y es un artesano del montaje de moscas, esas imitaciones de los insectos que sirven de alimento a los peces. Hoy y siempre el mundo del montaje de moscas para la pesca pasa por la herencia recibida de la sabiduría de los mayores, que a su vez la han ido captando de las anteriores generaciones. Basándose principalmente en esos montajes efectivos y duraderos en el tiempo. Pedro, utilizando las plumas de los gallos de León y los mejores materiales, hilos y sedas, monta artesanalmente las moscas secas manteniendo toda la cultura transmitida por los más expertos. Comprueba y estudia los insectos que se encuentra en sus correrías por los ríos de la zona consiguiendo una selección de montajes exclusivos. Como artesano no se limita a plasmar el tamaño y color de un insecto, sino a tratar de simular su comportamiento, sus movimientos y matices. Sus moscas favoritas son; Roja de Verano, Leporis, Fly Rite 34, Carne Podrida, Demetria, la Perica 44, etc. Lleva muchos modelos en las cajas porque dependiendo del día, de la hora o de la zona del río, ya sea tabla o corriente, eclosionan distintos tipos de insectos y hay que acertar con el que comen para poder engañar al pez. Aunque a pescar va muchas veces solo, le gusta ir al río con amigos, repartir los tramos, ir a relevos o pescar a la par si el río es ancho.
«La pesca es para mí la alegría de vivir, disfrutar de la naturaleza y de paisajes maravillosos y compartirlo» Sobre la gestión de la pesca en Castilla y León, nos indica que «en pleno siglo XXI es inexplicable que unas maravillas de la naturaleza, como son las truchas, se sigan matando. Y que tengan en cuenta que la mejor repoblación que se puede hacer en un río es no matar sus truchas autóctonas, porque si las dejamos vivir ellas se encargan de hacerlo. Los cotos de Villafeliz, Vegamián y Boca de Huérgano tenían que ser sin muerte hace tiempo, como lo solicito el Consejo de Pesca de León. Si queremos conservar los ríos que tenemos, si aspiramos a disfrutar de la pesca, todos debemos de avanzar en la misma dirección, respetando el río y los peces. Cuidemos la naturaleza, cuidemos el entorno».
Se unió en enero del año 2011 a Facebook, donde es conocido como “el hombre del Seyko”, por sus famosos videos de captura y suelta, donde el reloj marca el instante de la devolución.
Cuando le preguntamos que es la pesca para él, la sonrisa le ilumina el rostro y contesta rápido : «Esta pregunta para mí es muy fácil de contestar, porque es la alegría de vivir, practicar un deporte al aire libre en medio de paisajes maravillosos, disfrutar de la naturaleza pescado y compartirlo con amigos…la pesca lo es casi todo».
Para finalizar le pedimos que nos cuente alguna anécdota curiosa de sus aventuras por el río adelante: «Bien, pues la última vivencia simpática la viví hace unos días y la cuento, estoy pescando en el río Esla súper concentrado en una trucha que se cebaba con ganas cuando oí un chapoteo a mi espalda, mire hacía atrás y con asombro veo un corzo cruzando el río… y lo más extraordinario todavía es que la trucha subió, y con un ojo puesto en la trucha y otro en el corzo, la vi coger la mosca y la clavé, probablemente no se vuelva a repetir este lance, pero está gravado en mí memoria para siempre».
Quieres añadir algo más, : «Sí…Pescar una gran trucha, emocionarte con la pelea y soltarla es lo que más me satisface. Volver otro día y poder pescar el mismo pez es apasionante. Siempre, captura y suelta».
Un madrileño seducido por los ríos de León
Pedro Sienes lleva 35 años pescando y es un artesano del montaje de moscas que cambió Madrid por Boñar por estar "rodeado de ríos trucheros"
24/06/2022
Actualizado a
24/06/2022
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