Vuelta al 'cole' y a la normalidad en León

Este viernes arranca un curso para recuperar sensaciones. Septiembre ha servido para dejar atrás las restricciones por la pandemia que han marcado los dos últimos años académicos y que han obligado a un esfuerzo extra por parte de los alumnos, de los profesores y, en general, de los hogares. Con la mayor parte de la población vacunada y sin mascarillas a la vista, los reencuentros a las puertas de los colegios han dejado imágenes que no se veían desde principios de 2020, tal y como ha indicado la delegada territorial de la Junta, Ester Muñoz, durante la presentación del nuevo curso en el colegio Luis Vives.

Son 4.780 profesores y 57.499 alumnos leoneses no universitarios los que este mes vuelven a coger los libros en una incorporación a la actividad escolar y académica que se realiza de forma escalonada.

Son días de estrenos y nervios, de muchas historias, de muchas ilusiones y también de algunas añoranzas, como se ha podido comprobar a las puertas del colegio Leonés de José Aguado. Unos gritan de júbilo por saludar a los compañeros tras un verano de vacaciones y otros dan rienda suelta al llanto para los que consideran prematura la vuelta al pupitre.

Para los más mayores es hora de retomar las rutinas, las tareas y el estudio, pero también los amigos, los deportes o las artes. Algunos continúan en los mismos centros, otros pegan el salto al instituto o simplemente cambian de ciclo en el mismo colegio. Es el momento de las presentaciones y de los propósitos, de las advertencias y de los consejos.

Este curso llega además con la novedad de la Educación Infantil gratuita de 2 a 3 años, que se imparte en 99 centros de la provincia de León con un total de 1.352 alumnos. Sus familias se ahorrarán una media de 2.000 euros al año.

En el medio rural, las cuentas están claras. Las localidades con aulas de Colegios Rurales Agrupados con tres alumnos han pasado de las cinco del pasado curso a una en el actual y las de cuatro alumnos han pasado de dos a cinco. Solo un pueblo ha perdido su escuela, Sosas de Laciana, que se quedó con dos alumnos cuyos padres han decidido llevarles a la cabecera del CRA, ubicada en Villager de Laciana.

El nuevo curso llega con ocho nuevos ciclos de FP en la provincia que se imparten en La Bañeza, Veguellina de Órbigo, Santa María del Páramo, La Robla, San Andrés-Villabalter (2) y Ponferrada.

La delegada de la Junta ha hecho hincapié en las inversiones que la Consejería de Educación prevé para este curso, entre las que figuran 1,9 millones para mantenimiento de centros y tres obras nuevas, el Conservatorio, el polideportivo de Eras y el esperado y demorado instituto de Villaquilambre, para el que la Junta recibió hace dos meses toda la documentación sobre la cesión de los terrenos. Muñoz ha culpado a la Junta Vecinal de Navatejera del retraso en el cumplimiento de una promesa que data de hace tres años.

Todo ello unido a programas de conciliación y a ayudas para la gratuidad de los libros de texto y para la adquisición de dispositivos tecnológicos para tratar, según ha defendido la delegada, que el sistema educativo de la provincia y del conjunto de Castilla y León se mantenga en los máximos niveles de calidad.

Por su parte, el director provincial de Educación, Francisco Javier Álvarez Peón, se ha referido a las quejas de algunos padres que aún no tienen claro a qué colegio deben ir sus hijos. En este sentido, ha explicado que todos los alumnos tienen plaza adjudicada y que está pendiente la resolución de los cambios solicitados de forma voluntaria en función de las vacantes que pueda haber este viernes en unos centros educativos que ya han vuelto a la vida.